El contexto en la Argentina se encuentra, por un lado, marcado por la baja de los consumos y por la caída de los salarios reales, los cuales son causados la pérdida del poder adquisitivo que les gana a los sueldos de las personas. Y por otro, se cuentan los últimos días para la realización de las Primarias, Abiertas, Simultáneas y Obligatorias, PASO, del domingo, en los que los ciudadanos decidirán candidatos y miembros del Congreso.
Con este panorama, el CEPA (Centro de Economía de Política Argentina) realizó un informe respecto de los créditos de la Administración Nacional de Seguridad Social. «Hoy, los créditos ofrecidos por ANSES implican cuotas que van de 24 a 60 meses para jubilados (los anteriores eran de 12 a 60 meses)», reflejó la organización que destacó que la medida adoptada por la gestión de Macri es la misma de la del 2017.
Estos tienen montos cercanos a los $5.000 a $200.000, mientras que en el que el segmento de montos anterior iba de $1.000 a $60.000, y con un costo financiero total que van de 44,68% a 50,85%. Los titulares de PUAM, Pensión Universal para el Adulto Mayor, pueden acceder en las mismas condiciones, pero teniendo en cuenta un límite máximo de $70.000, donde antes el límite era de $12.000.
Para las beneficiarias y los beneficiarios de PNC, las condiciones emulan las de la PUAM, pero con un CFT más bajo, donde estos se enmarcan en 40,1% a 46,29%. Por otro lado, en el caso de las beneficiarias y los beneficiarios de Asignación Universal por Hijo (AUH) y de perceptores de Asignaciones Familiares, las cuotas pueden ser 24 o 36. En esta línea, por casa Asignación que se cobre (es decir, por cada hija/hijo), el CFT es de 54,14% y 48,91% respectivamente.
«El objetivo de la medida ya se podía encontrar en el decreto de 2017, donde, según el Gobierno, se apuntaba a reducir los niveles de pobreza sensiblemente a partir de la oferta crediticia», analizó la CEPA teniendo en mente las medidas tomadas por la gestión de Macri, y la situación por la que pasan las personas respecto a sus asignaciones, crédito sumados a la macroeconomía inestable.
Además, el decreto indica que a través de dichos préstamos «se logra un doble beneficio por cuanto, por un lado, se impulsa la microeconomía y, por el otro, se procura un mejoramiento sustancial de la situación de los titulares que accedan a los mismos». Y agrega que «deben resguardarse los ingresos de dichos grupos sociales posibilitando mejoras en su calidad de vida a través del otorgamiento de microcréditos, que garanticen la utilización de este con un fin social, y que tienda al progreso del solicitante».
«La sensible caída del consumo se profundiza. Frente a este escenario la estrategia electoral oficial ha sido impulsar distintas políticas cuyos efectos negativos tengan impacto y se perciban luego de la elección: los créditos Anses, el Ahora 12 y la implementación de la tarifa plana, además del congelamiento de precios por seis meses a través del Programa Productos Esenciales», concluyó el CEPA.
