La cantante Katy Perry dio una entrevista para la revista Vogue, en la que contó cómo superó un momento muy difícil en su vida. La mujer de 35 años tuvo depresión y encontró ayuda en la meditación trascendental. Contó que cambió su vida, a pesar de que probó varias medicinas antes. Además habló de la relación que tiene con su trabajo como artista y con el actor Orlando Bloom, su pareja.
La cantante está en pareja con Orlando Bloom hace varios años. Cría al hijo del actor, Flynn, de 8 años, junto a él. “Hacemos de todo con Flynn. Vamos a ver películas o a parques de diversión. Estamos haciendo cosas divertidas constantemente”, comentó. Mientras tanto no descuida su carrera musical. Comentó qué la inspira a la hora de escribir.
“Hice mucho trabajo mental, espiritual y emocional en los últimos años. La mentira más grande que nos han dicho como artistas es que tenemos que sufrir para crear. No quiero estar pasando dolor toda mi vida para hacer canciones”. Por eso, la cantante escribe canciones empoderantes y divertidas, le dedica su tiempo a temas que la alejen de la oscuridad.
Así fue como escribió algunas de sus canciones más famosas, “Roar”o “Firework”. Escuchando la música de Katy Perry jamás nos enteraríamos de lo mal que la pasó. Ella prefiere enfocarse en lo positivo y seguir hacia adelante. Esto a pesar de que la prensa muchas veces la destrozó con su crítica. Según Katy, a veces se sentía “como una piñata”.
La artista cerró la entrevista con una reflexión. “He estado en el ojo público por 12 años y he cometido muchos errores. Soy humana y todavía quiero intentarlo. No quiero ser vencida ni volverme una reclusa. Quiero vivir la vida. Y hacer eso puede significar que a veces te tropieces, pero lo que importa no es la caída, sino cuando te levantas”.
