En la jornada de este domingo, apareció sano y salvo el montañista, Diego Fontan. El mismo había subido a la montaña por La Estancita hasta El Cestrón con otras dos personas, pero se separó y sus compañeros dieron aviso a las autoridades para que lo encuentren. Inmediatamente se realizó un operativo que terminó dando con el paradero del hombre. Ahora, la Justicia catamarqueña está evaluando los pasos a seguir, ya que el deportista realizó una actividad que no estaba habilitada.
El pasado jueves, Diego Fontan empezó una aventura que no iba a terminar de la mejor manera. El montañista subió, junto a otras dos personas, a la montaña por La Estancita hasta El Crestón. La travesía iba tal como el grupo lo esperaba, pero al llegar a la cumbre todo cambió. En ese momento, el deportista se separó persiguiendo otro pico, acordó un punto de encuentro con sus amigos, pero nunca volvió. Al advertir esto, sus compañeros bajaron inmediatamente y dieron aviso a la Policía.
Inmediatamente, se organizó un grupo de rescate conformado por personal de Defensa Civil, un escuadrón especial de bomberos de la Policía de Catamarca, más los deportistas, Eduardo Campo y Eduardo Salas. Estos últimos fueron llamados por su experiencia en la montaña. Al ser encontrado, el montañista aseguró que sufrió un golpe cuando se separó del grupo en búsqueda del otro pico y que no “podía apoyar el pie”. Además, Diego Fontan declaró que estaba deshidratado.
Al bajar de la montaña. Fontan le mandó un mensaje a sus seguidores en las redes sociales. “Estoy bien, muchas gracias por la preocupación de todos”, manifestó el montañista. Igualmente, no son todas buenas noticias para el profesor de educación física. La justicia está evaluando que medidas tomar por la conducta del joven. Esto es porque hasta este domingo, todas las actividades deportivas estaban prohibidas, y en caso de comprobarse que subió el jueves podría sufrir una multa.
Los antecedentes de multas de la Justicia
En medio de la etapa del aislamiento social, preventivo y obligatorio en la provincia, la Justicia ya ha actuado en casos similares. El juzgado federal, a cargo del juez, Miguel Ángel Contreras, procesó a un grupo de ciclistas por la suma de 20 mil pesos a cada uno por violar las medidas de confinamiento. A su vez, este no fue el único caso en el que el Poder Judicial actuó de manera contundente. El hijo del fiscal Rafael Ruiz está bajo investigación por haber viajado a Tucumán falsificando una declaración jurada.
