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Política

Negociando con la salud de Catamarca: funcionarios y arreglos por Whatsapp

Así queda expuesto el negocio de la salud privada y las preferencias de los profesionales y autoridades por sobre el sector público.

Además de las malas condiciones del sector público, la salud se enfrenta a otro problema, el negocio de los sanatorios privados y los intereses escondidos tanto de autoridades, como profesionales médicos de beneficiar uno por sobre el otro. Así quedó en evidencia esta maniobra, tras conocerse la existencia de un grupo de Whatsapp en donde se derivan pacientes del interior a clínicas privadas de la capital catamarqueña.

El grupo se llama IAMST Catamarca, haciendo alusión en sus tres primeras letras al Infarto Agudo Miocardio y, con la ST, a una referencia que aparece en los electrocardiogramas. De este participan más de cien profesionales de la provincia de Catamarca. Si bien su principal función era la de dar indicaciones rápidas en casos de emergencias, se convirtió en una herramienta útil a la hora de beneficiar el negocio de la salud.

El encargado de sugerir y avisar cuales son las camas disponibles, que siempre suelen ser de los sanatorios Junín y Pasteur, es el director del SAME Catamarca, el doctor Norberto Bazán. No es sorpresa que estos centros médicos privados elegidos para las derivaciones sean de la corporación Jalil, familia a la que pertenece el actual intendente de la capital y gobernador electo de la provincia, Raúl Jalil.

El tema de la salud como negocio también tiene otros actores importantes. Por un lado la Obra Social de Empleados Públicos (OSEP) que es la encargada de atender pacientes en caso de que el hospital público San Juan Bautista no pudiera, y de afrontar el pago y derivar a los pacientes hacia un sanatorio privado. Además, se sospecha que los médicos también se inclinarían a beneficiar al sector privado, dado que allí consiguen mayores compensaciones económicas por su trabajo.

Tal es así que ya se denunciaron casos en los cuales un médico toma pocos turnos en el principal centro de salud de Catamarca, hospital San juan Bautista, y abandona antes su puesto de trabajo para poder atender en un sanatorio privado. Este tema, sin embargo, está disfrazado de buenas intenciones: los médicos y demás autoridades explican que se realiza esta derivación porque el sector público no cuenta con la tecnología para tratar determinados pacientes, pero en el fondo no hay interés en mejorar las condiciones de los hospitales públicos y gratuitos, ya que dejaría de verse tan beneficiado el sector privado.