En medio de la incertidumbre Argentina, Moody’s Investors Service anunció que bajó las calificaciones de la deuda argentina. A su vez, las calificaciones senior no garantizadas para registros en estantería también han sido reducidas a (P) ‘Caa2’ desde (P) ‘B2’. Además, las notas sobre la deuda a corto plazo de nuestro país se afirmaron en Not Prime, según informó el diario El Intransigente.
Según la calificadora, su decisión «refleja la creciente expectativa de pérdidas para los inversores como consecuencia de las crecientes presiones sobre las finanzas del gobierno». En los últimos días, esta presión se reflejó en la decisión del Gobierno de de postergar el pago de más de $ 8 mil millones de deuda a corto plazo y la intención de «reperfilar» su deuda con el Fondo Monetario Internacional.
Al mismo tiempo, señala el comunicado de la agencia, la calificación de la deuda a corto plazo de nuestro país se afirmó en Not Prime (NP). Esto significa que la Argentina alcanzó el punto más bajo en la escala de calificación a corto plazo que propone la agencia norteamericana Moody’s Investors Service. Para los tenedores de estas deudas, una reestructuración futura se transformará en pérdida de lo invertido.
Entre sus justificaciones, la calificadora estadounidense asegura que un reperfilamiento futuro de la deuda llevaría a una pérdida de entre 10% y 20% de los montos adeudados. Aun así, Moody’s no cree que la calificación continúe bajando, a menos que, exista un empeoramiento de la situación del país, donde se incluye el crecimiento y la deuda.
Esta calificación se da tras la rebaja a un «default restringido», según la agencia Fitch Ratings. En términos financieros, la calificación pasó de «CCC» a «RD». Al igual que Moody’s, Fitch consideró que la Argentina está «en incumplimiento de sus obligaciones soberanas» debido a la decisión de Macri de extender los plazos de vencimientos de la deuda con el Fondo Monetario Internacional.
A su vez, Standard & Poors Global Ratings había considerado que nuestro país se encontraba en un «incumplimiento selectivo». Esta calificación se debía por los pagos retrasados de hasta 101 mil millones de dólares. Sin embargo, en horas del mediodía, la agencia calificadora se retractó y retomó su nota anterior. Esta retractación se debió a que el reperfilamiento de los pagos no tenían fechas, pero una vez publicadas, la calificadora retomó su puntaje.
Las bajas calificaciones a nuestro país se producen luego de la decisión del Gobierno Nacional de enviar un proyecto de ley para renegociar los plazos de vencimiento de la deuda local. Este proyecto iba a ser presentado en el Congreso durante el día de hoy, pero se confirmó que recién se lo ingresará el próximo lunes al Parlamento argentino.