La pérdida del poder adquisitivo del dinero es una consecuencia del fenómeno que es catalogado como impuesto, la inflación, el cual afecta de manera directa a toda la macroeconomía de una sociedad. En este sentido, el Índice de Precios al Consumidor fue informado por el Instituto Nacional de Estadística y Censos de la República Argentina (INDEC). Según el diario El Intransigente, el índice en agosto fue del 4%.
De esta manera se deja atrás el número conocido en julio, que con el 2,2% fue el más bajo del 2019. Es por ello por lo que la suba interanual ascendió al 54,5% en los últimos 12 meses mientras que el acumulado hasta agosto fue del 30%. Cabe recordar que lo previsto para septiembre superaría todavía más lo conocido hace minutos.
El resultado se debió a la brusca devaluación ocurrida tras conocerse los resultados de las elecciones primarias que se trasladó a los precios como sucede cada vez que se produce la pérdida de valor del peso. Esta es la razón por la cual se disparó desde la segunda quincena de agosto el Índice de Precios al Consumidor (IPC).
En este marco, el rubro que mostró el impacto más marcado fue, como se esperaba, el de alimentos y bebidas, cuyo incremento fue del 4,5%. Cabe recordar que el aumento pudo haber sido más fuerte de no ser por la implementación de la quita del Impuesto al Valor Agregado (IVA) a 14 categorías de los productos que componen la canasta básica.
En ese sentido, diversas consultoras coincidieron en que esta medida generó una baja de los precios cercano al 0,9% en promedio, lo cual derivó en un aumento de la demanda de estos elementos en comparación con igual mes del año pasado. Sin embargo, los demás productos evidenciaron mermas importantes todavía.
Tal es el caso del rubro equipamiento del Hogar con una suba del 6,1%, luego le siguió el ámbito de la salud con un 5,2%. Además, las bebidas alcohólicas y el tabaco crecieron un 4,4%, el transporte también un 4%, recreación y cultura un 4,2%, restaurantes y hoteles 3,6% y prendas de vestir y calzado otro 3,1%.
Con respecto a la inflación núcleo, esta fue del 4,6%, mientras que en lo que respecta a los precios de los regulados, ascendieron al 2,1% y los productos estacionales subieron al 3,9%. Para finalizar, el valor de los bienes alcanzó un 4,9% y el de los servicios llegó al 2,3% según lo comunicado por el instituto estadístico oficial.