El presidente de Argentina revolucionó a todo el país, este viernes, al dirigirse a la Universidad de Buenos Aires. Allí se sentó junto a otro profesor y le tomó examen a sus alumnos de la cátedra Teoría General del Delito y Sistema de la Pena. Las redes sociales explotaron con publicaciones de este tema y Alberto confirmó que no se tomará licencia en la casa de estudios.
Alberto Fernández pasó por primera vez una noche en la quinta presidencial de Olivos. Luego de levantarse por la mañana, usó el helicóptero oficial y aterrizó en Casa Rosada. Minutos después de atender unos llamados, el presidente se dirigió a la sede de la Universidad de Buenos Aires ubicada en avenida Figueroa Alcorta, para tomarle una evaluación a sus alumnos.
El mandatario ingresó minutos antes de las 10 de la mañana a la sede universitaria y se retiró pasada las 12:15. Allí pasaron sus alumnos los que no dejaron pasar la oportunidad para sacarse una foto con el nuevo presidente de Argentina. A la salida de la facultad Alberto Fernández que se iba contento, ya que sus estudiantes fueron preparados y aprobaron todos.
El presidente como es normal usó su Twitter y comentó: “No quise dejar de venir hoy a la Facultad de Derecho de la UBA a tomar exámenes finales a mis alumnos y alumnas de Derecho Penal.La educación pública gratuita es uno de los valores más importantes que tenemos. Vamos a defenderla con el ejemplo y con los recursos que merece”.
Fernández generó polémica porque aseguró que no se iba a tomar licencia. Esto en un principio iría en contra del artículo 92 de la Constitución, la cual expresa que “el presidente y vicepresidente disfrutan de un sueldo pagado por el Tesoro de la Nación. Durante el mismo período no podrán ejercer otro empleo”. Según versiones hay una ley que lo avala, pero se deberá esperar para ver si el mandatario cumple con su palabra.