El titular YPF le había advertido a Alberto Fernández que tenía que subir el precio de las naftas un 10%, el mandatario le dijo que eso le parecía mucho y que le iba a autorizar sólo un 5%. Estaba previsto que impacte en los primeros minutos de este lunes 30 de diciembre. A pesar de esto, el presidente de la nación dio marcha atrás en la medida y la canceló.
La suba de los combustibles fue un tema que impactó durante todo el fin de semana, y en algunas estaciones de servicio se hicieron colas para poder adquirir antes de que aumente el precio. La medida ya había sido comunicada a todas las sucursales del país, y como YPF controla el 60% del mercado, iba a tener un efecto cascada en las otras empresas que venden naftas.
En la noche de este domingo, el presidente llamó a Nielsen y le comunicó la “inconveniencia” de avanzar con este ajuste, en un momento en el que el poder ejecutivo está tratando de bajar el ritmo de la inflación. Esto frenó la suba y desde Casa Rosada hicieron trascender que nunca existió la autorización para que YPF aumente, ya que todas las tarifas están congeladas por seis meses.
Alberto Fernández cree que las petroleras “ganaron mucha plata en estos años”, junto con el resto de las empresas del sector energético, el agro, la minería y el sistema financiero. Además, esta medida iba en contra de la orden del gobierno de la nación de congelar las tarifas por al menos seis meses. A lo largo del 2019, la nafta había aumentado un 41%.
Nielsen había planteado la necesidad de “recomponer” los precios, ya que para el sector petrolero existe un retraso del 15% para equilibrar los niveles de facturación con los costos. El economista está terminando de definir el plan para atraer capitales al yacimiento no convencional de Vaca Muerta, y para ello necesita tentar a los inversores con determinados márgenes de rentabilidad.
Fuente: NA