Por cuarto mes consecutivo desde que empezó el aislamiento social preventivo obligatorio, los precios de las frutas y las verduras treparon un 10, 80% sólo en julio y ya casi no queda nada en la verdulería que cueste menos de 100 pesos el kilo. Lideraron la suba la cebolla con un 33,33%, el tomate perita, con un 21,21% y las berenjenas, 9,52%. En julio los alimentos aumentaron 5,63%, uno de los meses más crudos económicamente hasta ahora. Esta semana se realizará la medición oficial del INDEC.
Además, tampoco se quedaron atrás los productos de almacén y las carnes, ya que en ambos casos también hubo subas de 4,39% en todo el primer rubro y de 4,38% en el segundo caso. En los primeros, el pan y la yerba compartieron el podio de los que más subieron con un 7,69% mientras que la carne picada subió un 9,09% en el segundo. Son datos de Consumidores Libres, que conduce Héctor Polino, y que todos los meses computa los mismos productos vendidos de manera virtual en los mismos supermercados de los mismos barrios porteños.
Resulta un poco contradictorio que desde Nación busquen garantizar y extender los programas de asistencia financiera para fomentar el consumo y palear (de alguna manera) la recesión productiva, cuando la canasta básica se incrementa día tras día en bienes indispensables para una alimentación saludable, como lo son las frutas y verduras.
El aumento de los precios de la canasta básica de alimentos es una preocupación constante en el país, debido a la galopante inflación. Pero la preocupación se agudizó con la cuarentena porque implica una bomba de tiempo para la inflación en la segunda mitad de este año, cuando la medida sanitaria finalice y se permitan los aumentos que hasta ahora están prohibidos en otros sectores claves, como los combustibles y las tarifas.
Cada día, la mesa de los argentinos se vuelve más cara. Esto explica también por qué una de las mayores compras que se realizaron en el Hot Sale 2020 fue justamente de alimentos y bebidas. Las familias aprovecharon los descuentos para armar el stock de comidas necesarias para sobrevivir. Y, como bien sabemos, los próximos meses aumentará todo y es por ello que siempre es mejor prevenir y comprar de más.