Thelma Fardin acusó públicamente a Juan Darthés por violación hace unos meses. En un vídeo que en vivo dijo: “Durante 9 años lo anulé para seguir adelante. Hasta que hace unos meses escuché a otra chica acusar a la misma persona, y eso fue un cachetazo para mí”.
“En el año 2009 estaba de gira con un programa infantil muy exitoso. Tenía 16 años, era una nena. El único actor adulto que viajaba con nosotros tenía 45 años. Una noche comenzó a besarme el cuello y yo le dije que no. Me agarró la mano, me hizo que lo tocara y me dijo ‘mirá cómo me ponés’ haciéndome sentir su erección”, prosiguió.
Y agregó: “Yo seguía diciendo que no. Me tiró en la cama, me corrió el short y empezó a practicarme sexo oral. Yo seguía diciendo que no. Me metió los dedos. Yo seguía diciendo que no. Le dije ‘tus hijos tienen mi edad’. No le importó. Se subió encima mío y me penetró”.
“En ese momento, alguien tocó la puerta y yo pude salir de esa habitación. Gracias a que alguien habló, yo hoy puedo hablar. Y cuando lo dije, me encontré rodeada de personas que estaban dispuestas a acompañarme, a cuidarme, y sobre todo, a darme mucho amor”, concluyó.
A partir de esto, fueron muchas las personas que se animaron a contar sus historias y denunciar situaciones de acoso o abuso. Esta vez quien se animó a hablar al respecto fue Joaquín Furriel, el actor estuvo como invitado en el programa de Mirtha Legrand y narró una terrible experiencia que vivió de chico en sus primeros pasos en el mundo de la actuación.
“Me pasó en el conservatorio con un productor y director, que sé que está muerto, que era muy importante en Canal Nueve en ese momento. Iba a hacer un telefilme en el conservatorio, me pidió ensayar un sábado”, comenzó a contar.
Y agregó: “Fui, cerró la puerta y me empezó a decir ‘ahí donde estás sentado vos estuvieron sentados tal, tal y tal’. Todos nombres que a mí me parecían atractivos. Yo tenía 19 años, pelo largo hasta la cintura, recién venido del sur. No tenía ni idea y no tenía contacto con ese tipo de personajes, no lo conocía”.
“Me empezó a decir ‘me gustaría invitarte a un viaje el fin de semana para no se qué’. Fue una situación muy violenta y muy incómoda. Al tipo le dije ‘yo me voy’ y me respondió ‘si te vas de acá, no vas a trabajar nunca más’. ‘¿Vos cuántos años tenés? Bueno, voy a esperar. Cuando vos te mueras, con mi primer laburo, te voy a comprar unas florcitas y te las voy a llevar a la tumba, hijo de pu… ¡Abrí la puerta o te cag… a trompadas! En ese momento yo no maneja ese tipo de sutilezas. ¡Era un pibe!”, cerró.