La localidad de Antofagasta de la Sierra está viviendo una crisis sanitaria sin precedentes. El departamento minero, conocido como el “oro blanco” por la extracción del litio, vive en estado de precariedad total en sus hospitales. Desde El Aconquija informamos que el Gobierno entregó “como nueva” una ambulancia que no tiene rueda de auxilio, ni camilla, ni tubo de oxígeno.
Los lectores de El Aconquija compartieron imágenes del estado deplorable en la cual entregaron la ambulancia: completamente vacía, con una rueda de auxilio en pésimo estado, sin camilla, sin tabla, sin tubo de oxígeno. Este vehículo viejo fue llevado al hospital de la zona de Antofagasta, supuestamente, “en condiciones óptimas” para poder atender urgencias.
Actualmente, hay empresas de litio que trabajan en la zona y parecen “no conocer” estos temas de prioridad número uno para la comunidad, puesto que nos encontramos en un contexto de emergencia sanitaria. Las firmas que están detrás del “oro blanco” están lejos de la salud de la población, otra vez parecen ajenos a la realidad porque con algunas acciones espasmódicas no se solucionan problemas de fondo. LIEX o FMC hace más de 2 décadas que sacan litio en la zona.
Al fin y al cabo, Antofagasta y su intendente, el radical Julio Taritolay, no tienen como prioridad en su agenda pública la salud. Desgraciadamente, el poder económico ha hecho que los malos manejos en los municipios catamarqueños sean algo común. Las personas que adquieren un poco de poder se creen capaces de realizar cualquier acción, en contraposición al bien común.
Es inaceptable que incluso en plena pandemia, quienes deban velar por el bienestar y la salud del pueblo que los eligió, no hagan más que poner palos en la rueda para que el sistema sanitario funcione adecuadamente. Tanto el intendente Taritolay, como la ministra de Salud, Claudia Palladino y el gobernador, Raul Jalil, son cómplices de un sistema ineficiente en la salud. Desde Antofagasta solicitan lo mínimo indispensable, que es un traslado adecuado de pacientes. Y un poco de respeto hacia toda la comunidad.