El pasado miércoles, un policía estadounidense le provocó la muerte a George Floyd, sin motivo alguno. Luego de esto, una gran cantidad de personas salieron a reclamar por este asesinato y hasta quemaron una sede de la fuerza de seguridad. En este contexto, el alcalde de Minneapolis, Jacob Frey, tomó una fuerte determinación. El mandatario decretó el toque de queda.
NA informó que el toque de queda comenzó a regir a partir de este viernes 29 de mayo, en la ciudad del estado de Minnesota, centro norte de Estados Unidos, y continuará durante todo el fin de semana. La normativa prohíbe movimientos y reuniones en público desde las 20:00 hasta las 6:00 del sábado. Los periodistas tampoco podrán salir a trabajar en este contexto.
Las fuerzas de seguridad, el personal médico, los soldados de la Guardia Nacional están desplegados. Cualquier individuo que “necesite atención médica, debe alejarse de situaciones de riesgo o esté en condición de calle” están exceptuados de la medida. La violación de estas disposiciones está penada con hasta 90 días de prisión y multas de hasta 1.000 dólares. Varias ciudades se han sumado a las protestas por la muerte del Floyd.
En Atlanta se registraron enfrentamientos entre manifestantes y la fuerza de seguridad que arrojó como saldo detenidos y heridos. Esto se dio sobre todo frente a la sede de la CNN, cuyos periodistas fueron arrestados hoy en medio de una manifestación por el solo hecho de estar cubriendo. El jueves por la noche, manifestantes indignados coparon las instalaciones del edificio de la policía local y lo prendieron fuego.
El crimen que desató la furia
En un video que se hizo viral, a Floyd se lo ve esposado e inmovilizado en el suelo. Mientras, uno de los uniformados, Derek Chauvin, que fue detenido este viernes, mantenía su rodilla sobre su cuello. En esa escena se observa y escucha que la persona arrestada gritaba: “No puedo respirar”. A raíz de la situación se desató la ira popular. El gobernador, Tim Walz, activó la Guardia Nacional por primera vez en 34 años.