El pasado 25 de mayo, George Floyd murió en manos de la policía. El momento de su muerte fue registrado en un video que recorrió el mundo, causó indignación y una ola de violencia en Estados Unidos reclamando justicia. En la jornada de este martes, el ciudadano norteamericano recibió el último adiós de sus seres queridos en la iglesia de Houston. La ceremonia tuvo 500 asistentes.
El féretro dorado con los restos mortales fue ingresado a una iglesia de Houston, Texas, por varios hombres afroestadounidenses con traje y barbijo negros -este último una protección obligada durante la pandemia- para una ceremonia con unos 500 asistentes, por estricta invitación de la familia, que capea seis días de duelo. “Duele mucho”, dijo hoy Philonise, hermano de George Floyd, sin poder contener las lágrimas.
“Tendremos justicia. La tendremos. No dejaremos que se cierre esta puerta”, agregó. Mientras el ataúd era transportado al interior del templo Fuente de la Alabanza, el mismo en el que ayer unas 6.000 personas acudieron a su último gran homenaje público -el tercero en una semana-, agentes de la policía de Houston formaron un pasillo y rindieron honores a George Floyd.
Parientes y amigos vestidos de blanco, líderes comunitarios, políticos locales, legisladores federales y referentes negros participaron de este último funeral. Lo hicieron entre rezos, elegías y canciones que recordaron a George Floyd. También, reclamaron justicia y un cambio en Estados Unidos para acabar con el racismo. La ceremonia fue transmitida en directo por los principales canales del país.
Joe Biden participó de la ceremonia
La ceremonia contó también con la participación del probable candidato presidencial opositor Joe Biden a través de un video grabado. “A diferencia de la mayoría, tienen que hacer el duelo en público y eso es una gran carga. Un peso que ahora es su propósito para cambiar el mundo para mejor. Todo en el nombre de George Floyd“, aseguró el político. Además, agregó: “Ahora es el momento de lograr la justicia racial”.