Llegaron bolsones a Catamarca. Los mismos fueron enviados desde el gobierno de la nación, para combatir el hambre en Catamarca. Lamentablemente, los módulos alimentarios fueron entregados sin tomar ningún tipo de prevención o cuidado atento a la cuarentena obligatoria. Todos sabemos que la cuarentena por el COVID-19 fue decretada por el presidente Alberto Fernández. La desorganización institucional se notó al punto que el reclamo fue interno en el peronismo local, pues la contradicción oficial es aberrante. ¿A qué político hay que meter preso por esta violación?
¿Bolsones o coronavirus?
Sin duda, la emergencia es tanto sanitaria, como alimentaria. Hay irresponsables en todos los niveles sociales desconociendo las recomendaciones para mantener al virus al menos semidormido. Pero también existe la necesidad de conseguir alimentos que mueve a la gente a la calle, cuando la recomendación es no moverse de la casa. De manera que la cuestión es cómo garantizar lo elemental sin romper la cuarentena. Empezando con ejemplos desde arriba.
El problema de la ayuda que mandó Alberto, canalizado por el ministerio de Desarrollo Social, es que se entregaron los bolsones como si el virus del COVID-19 no representara una verdadera amenaza. Mientras que, por un lado, el presidente habla de endurecer las medidas, funcionarios nacionales y dirigentes catamarqueños peronistas desconocen el decreto presidencial entregando bolsones mientras violan la cuarentena.
Si hay ciudadanos irresponsables presos, que estos políticos tampoco zafen. Para el concejal peronista Francisco Sosa, se trató de egoísmo, una falta de respeto y una cuestión de inoperancia. La organización brilló por su ausencia y la desesperación ganó la calle para llegar de cualquier manera en este momento crítico. El titular de Desarrollo Social local es Marcelo Rivera que seguramente tendrá que explicárselo al funcionario nacional Daniel Arroyo.
“Hoy nos despertamos con la visita de los camiones de Desarrollo Social en la Avenida Los Legisladores para entregar los bolsones empadronado que pertenecen a la Zona del Barrio Eva Perón. Pero ¿a quién se le puede ocurrir en los tiempos que estamos viviendo semejante irresponsabilidad tanto para los empleados y los vecinos sin ninguna medida de prevención?”, escribió el concejal Francisco Sosa lo que dejó entrever además una interna detrás de la ayuda.