En el marco de las actividades exceptuadas ante el Aislamiento Social Preventivo y Obligatorio, el gobernador Raúl Jalil decretó que los municipios podrán tener su propia flexibilización. Raúl Jalil habilitó a las autoridades municipales para dictar normas reglamentarias para habilitación de ciertas actividades y servicios necesarias para la comunidad en este tiempo de pandemia por covid-19. Cada jurisdicción apelará a la apertura de su sector necesario, siempre bajo medidas preventivas.
El instrumento legal que se presentó explica que esta decisión fue tomada en atención a las condiciones epidemiológicas y a la evaluación de riesgo de cada jurisdicción. A partir de este decreto gubernamental, los intendentes están habilitados para emitir la normativa destinada a reactivar servicios y actividades en el territorio que corresponda dentro de la provincia. Cada normativa municipal, según estipula el decreto, deberá estar conforme a la situación sanitaria que registre su comuna cumpliendo con los protocolos.
Nueva flexibilización
Ayer, el Gobernador anunció las nuevas excepciones de actividades que tendrán excepción en el marco del aislamiento social. Jalil firmó el decreto 1143 del 6 de julio de 2020, en este se exceptuaron diferentes actividades y servicios para Catamarca. Entre estas habilitaciones se encuentra el personal afectado a la obra pública y al área de Salud: la atención médica y odontológica programada, de carácter preventivo y seguimiento de enfermedades crónicas, con sistema de turno previo.
Por otra parte, ya están exceptuados los laboratorios de análisis clínicos y centros de diagnóstico por imágenes, con sistema de turno previo; al igual que las ópticas. Se habilitó la venta de mercadería de comercios minoristas, a través de plataformas electrónicas, de venta telefónica y otros mecanismos que no requieran contacto personal con clientes. El decreto 1143 también confirma la flexibilización para toda la actividad industrial de la provincia.
El Primer mandatario decidió exceptuar en esta “nueva fase 1” a los establecimientos que desarrollen actividades de cobranza de servicios e impuestos. Además, esto incluye a todas aquellas actividades que el Banco Central de la República Argentina disponga como imprescindibles. El jefe de Gobierno aseguró que garantizará el funcionamiento del sistema de pagos. Asimismo, continúan algunos sectores que ya habían sido exceptuadas en el marco del ASPO, como los servicios de comunicación.