Hay que decirlo y gritarlo a los cuatro vientos: somos ricos, muy ricos. ¿Por qué? Porque Argentina es uno de los países con mayor diversidad biogeográfica del mundo. Así lo recuerdan desde la cuenta oficial de Twitter de Parques Nacionales, una oportunidad para ver y conocer las riquezas naturales del país.
Conserva 18 ecorregiones a través del Sistema Nacional de Áreas Protegidas, que son zonas que comparten un tipo de paisaje, clima, flora y fauna, por ejemplo, las Yungas y los Bosques Patagónicos, áreas naturales de extrema importancia para el ecosistema en toda la región.
No sólo en el norte somos ricos por las selvas de yungas en Jujuy, Salta y Tucumán. Entre tantos otros tenemos al Parque Nacional Baritú, que hace pococ umplió 45 años protegiendo la Selva de las Yungas en la provincia de Salta, según informa El Intransigente.
Más al sur, ya con el clima frío, llega el Parque Nacional Nahuel Huapi, donde recientemente concluyeron las tareas de rediseño y mejoras del último kilómetro del sendero a Playa Muñoz para preservar las condiciones ambientales, mejorar la seguridad y optimizar las vías de escape ante diferentes emergencias.
Esto, debido a la gran cantidad de turistas de todo el mundo que llegan a la Argentina para disfrutar de semejantes escenarios naturales, incluidos el Glaciar Perito Moreno y la Ruta de los Siete Lagos.
Volviendo al noroeste, una Maravilla Natural del planeta: la Garganta del Diablo, el salto más grande del Parque Nacional Iguazú. Es el lugar donde el agua cae con tanta fuerza que, al golpear en las rocas, se pulveriza en millones de gotitas de agua. El rocío formado se eleva como una nube en la que aparecen múltiples arcoíris.
Estos son, apenas, algunos de los destinos naturales que Argentina ostenta en todo el planeta. Desde las yungas al calor del norte al frío y el hielo del sur más hermoso que se haya conocido. Todo constituye una riqueza invaluable que hay que preservar, resguardar y defender por el futuro de la humanidad.