El presidente de la Nación anunció desde el principio de su gestión que iba a hacer una restauración en la secretaría de inteligencia. Este jueves, el mandatario decretó una nueva medida que afecta a esta institución. En la normativa se expresa que estos organismos no podrán ser auxiliares de la justicia. Además, se explicó que esto se debe a que esa relación “permitió generar y retroalimentar vínculos espurios”.
El Intransigente informó que en este sentido, tampoco podrá obtener información, producir inteligencia o almacenar datos sobre personas. Por el solo hecho de su raza, fe religiosa, acciones privadas, u opinión política. O de adhesión o pertenencia a organizaciones partidarias, sociales, sindicales, comunitarias, cooperativas, asistenciales. Culturales o laborales, así como por la actividad lícita que desarrollen en cualquier esfera de acción.
Asimismo, la Agencia Federal de Inteligencia no podrá “influir de cualquier modo en la situación institucional. Política, militar, policial, social y económica del país. En su política exterior, en la vida interna de los partidos políticos legalmente constituidos. En la opinión pública, en personas, en en medios de difusión o en asociaciones o agrupaciones legales de cualquier tipo”.
Los cambios en la Ley de Inteligencia
El decreto destaca que este órgano tampoco deberá “revelar o divulgar cualquier tipo de información adquirida en ejercicio de sus funciones. Relativa a cualquier habitante o a personas jurídicas, ya sean públicas o privadas, salvo que mediare orden o dispensa judicial”. En esta línea criticaron el decreto 656, sancionado durante el gobierno de Cambiemos. “Significó consagrar el secreto para el empleo de los fondos reservados por parte de los agentes de inteligencia del Estado”, manifestó el actual presidente.
Por este motivo, la norma formalizada hoy explica que consideran necesario “adoptar una medida urgente para lograr bases sólidas para el referido reordenamiento. Disponiendo una modificación esencial sobre una de las áreas del Sistema de Inteligencia Nacional. Que mayores distorsiones ha evidenciado, como es su interacción con el sistema de administración de justicia”.
