En un contexto donde estamos en las últimas horas para el cierre de las listas que se enfrentarán en la Primarias, Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO) en el 11 de agosto, Jorge Yoma, embajador argentino en Perú opinó sobre la coyuntura política y la «rosca» que se lleva a cabo.
«Se está discutiendo quién va con quién, y después de la caída del sistema político, nadie puede pedir coherencia en el historial de los candidatos. Es la primera vez que los candidatos a presidente son porteños, y los temas que se debaten, son los de la clase media porteña», destacó críticamente Yoma.
Mientras, por otro lado, reconoció la importancia de la incorporación de Miguel Ángel Pichetto como precandidato a vicepresidente por el espacio de «Juntos por el Cambio», ya que, «la devolución de IVA a las provincias fue gracias a la gestión de Pichetto. El Gobierno con él agrega una agenda que no tenía».
De esta forma, expresó que «o vamos a una democracia consolidada con inserción internacional o volvemos a un remedo de monarquía que las instituciones dependan de la voluntad de una sola persona». Estos dichos fueron orientados a la figura de la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner.
«No me sorprende que CFK cubra todas las candidaturas, ella va a tener todo el poder. Va a haber un problema institucional, al país nunca le fue bien cuando el poder no lo tuvo el presidente. En ese esquema, un remedo monárquico, yo rompí por eso», aclaró el embajador.
También recordó los sucesos en los cuales emitió su voto en contra. «Recuerdo cuando decidió quitarle los fondos judiciales al Banco Ciudad, fue una orden de Cristina y voté en contra. Con el Pacto con Irán, dije que era delictivo, no se discutía porque era órdenes de Cristina, voté en contra. Las órdenes las dará CFK», determinó sobre si el futuro es representado por la precandidata a la vicepresidencia.
Por último, Yoma opinó que «pichetto trae una agenda que hace falta, la visión federal. Necesitamos un nuevo pacto federal. Tenemos que trasponer una economía abierta al mundo». Esto traería a la Argentina una mayor competitividad y permitiría que las inversiones lleguen al país para generar más empleo para los ciudadanos.
