El operativo del Ministerio de Salud Pública, dirigido por Rossana Chahla, pretende garantizar que ningún trabajador haya vuelto enfermo. Los 83 trabajadores golondrinas llegaron a la provincia y se encuentran aislados para la realización de los estudios. Con los resultados obtenidos se definirá si cada obrero continúa a su hogar o permanece en aislamiento.
Este control se enfoca en grupos de personas que vienen de lugares con circulación viral. Si alguno de ellos tuviera el virus podría contagiar a su familia y también a otras personas. Al llegar a Tucumán separaron a los trabajadores y los aislaron para realizar los hisopados y controles correspondientes.
Este puesto de control sanitario está instalado en la Escuela Técnica Juan XXIII. Ana Karina Marteau es directora de la institución y cuenta que únicamente se han aislado a cinco contingentes. Dieron de alta a todos los contigentes anteriores, ninguno dio positivo a los controles de coronavirus. Del último contingente de 83 obreros, los mismos llegaron desde Neuquén, Río Negro, Córdoba y Mendoza.
La respuesta de los trabajadores al llegar a Tucumán fue amable. Todos coincidieron que esperaban irse a casa pero entendieron que los controles son necesarios. Los obreros se mostraron agradecidos con el personal de la salud que los controla hace cinco días.
El control sanitario en los ingresos a Tucumán es un trabajo conjunto y coordinado entre distintas instituciones. En este caso participan de forma activa los ministerios de Salud, Seguridad y Desarrollo Social. Combinando tareas de control y sanidad para mantener protegida a la provincia del coronavirus.
