Atravesamos un contexto marcado por la alta inflación, la cual supera de forma alarmante a la de otros países del mundo y de América del Sur como Chile. El país vecino tiene anualmente una pérdida del valor adquisitivo del 0,0% en junio, mientras que en Argentina se registró una cifra del 2,7%, teniendo en cuenta la desaceleración que se produjo desde marzo, que detalló un número de 4,7%. Por el mismo camino, en Abril demostró un 3,4%, en mayo un 3,1%, hasta llegar al índice lanzado por el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos.
A poco más de 24 horas de conocerse el índice de precio al consumidor (IPC) y de que la inflación del mes de junio fue del 2,7%, según el diario El Intransigente, las repercusiones de los indicadores siguen dando que hablar entre los entendidos del tema, quienes advierten que la inflación continúa en baja pero que todavía falta mucho para estabilizar la economía. Ahora fue el turno del economista Rodolfo Santángelo, quien aprovechó el aire de Radio Mitre para brindar su visión acerca del panorama económico por el que atraviesa el país. Hizo alusión al índice de inflación, al acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI) y las políticas económicas desarrolladas por el Gobierno.
«La verdad que es decepcionante el número, en el sentido que uno está esperando que la medicina haga bajar la fiebre y esto no termina de suceder. Entonces, 2,7% comparado con 4 está bajando pero es un número altísimo. Está claro que hay un piso difícil de perforar y el mes de julio va a venir muy parecido», afirmó.
Para el economista, da la sensación que cada vez son más los organismos que no confían en que, de una vez por todas, se tendrá una baja simbólica de la inflación. «El FMI mismo casi ha tirado la toalla, porque cuando tira el número de 40% en el año es como que reconoce implícitamente que el 2 es difícil de perforar. Argentina es un enfermo crónico en materia inflacionaria y esta buena letra de mejores números fiscales y restricción monetaria a los golpes de este plan rudimentario que tenemos con el acuerdo con el Fondo está tardando en generar», agregó.
El especialista detalló que haber creído que la inflación estaba con tendencia declinante fue un exceso de optimismo de las autoridades y recalcó que esto demuestra que las cosas puntuales de Precios Cuidados y de congelar tarifas, es pan para hoy y hambre para mañana. Por otro lado, indicó que el rezago acumulado en las tarifas del transporte público es equivalente a lo que era en el 2015 las tarifas eléctricas. En este sentido, explicó que lo que está demorando en bajar es la inflación de origen macroeconómica y que, partir del 10 de diciembre, hay que intentar algo más contundente.
“Si bien muestro mi perplejidad porque la inflación no baja, siempre fuimos contundentes que en este programa las flores no crecen en el jardín. Esa desesperación por buscar un mes para arriba y el Ahora 12, esos son anécdotas. Acá estamos con un consumo muy bajo y no hay ninguna chance de recuperación económica del consumo por lo menos hasta el año que viene“, aseguró el economista.
Por último, el especialista precisó que «las señales de recuperación vienen del sector agrícola que tiene una gran cosecha, del sector energético que está lucrando con Vaca Muerta y el aumento en la producción de gas, y también un poquito de la temporada de turismo». Y luego cerró: «Todavía vamos a estar bastante tiempo por debajo de los mejores momentos de consumo. Es una economía que está sufriendo diez años de política macroeconómica mal diseñadas».
