Debido a la cuarentena y por falta de recursos, el profesor de Geografía, José Nolasco Retamozo, de la Escuela “Juan Chelemín” (1000 viviendas-SFVC) fue a tomar un examen en la casa a una alumna de apellido Vera. La familia no tenía acceso a tecnología, ni siquiera un teléfono celular, por lo que la única forma de ayudar a la estudiante era llegar hasta el domicilio y así poder completar el curso. Los ejemplos esperanzadores en tiempos de COVID-19.
El docente le comentó a El Aconquija que se hizo de manera excepcional, debido a que la alumna no disponía de teléfono celular para poder proceder por videollamadas. Como en la casa solo hay teléfono fijo, el profesor Retamozo se comunicó con los padres y llegó con otros integrantes de la comunidad educativa para dejar sentado que el examen se tomó a pesar de la dificultad económica de la familia.
La adolescente debía completar el primer año, ya que debía materias para pasar a segundo año, pero el aislamiento por el CV-19, que afectó la normalidad de las clases, ponía en riesgo esa posibilidad. A todo esto se le suma la falta de recursos, sin un buen celular e incluso internet, faltan herramientas para avanzar. El problema motivó al docente que no dudó en acercarse a la casa de la familia Vera con el objeto de facilitar los medios para que la joven pueda rendir.
La chica se había presentado antes sin poder aprobar, lo que preocupó al docente. El padre se había comprometido a hacerla estudiar y, junto con una amiga de la estudiante también, presenciaron el examen. Retamozzo afirmó que en esta era del CV19 se las “ingenian” para llegar a los alumnos y comentó que escuchó que un docente le enviaba la tarea a un delegado y éste iba por todas las casas de los padres con la tarea. Además, agregó que en el interior la labor es titánica.

La tecnología y la disponibilidad de recursos condiciona al proceso de enseñanza-aprendizaje, pero ayer Vera Jara Salma aprobó con 6. Felicitaciones a la joven estudiante por no bajar los brazos y al papá por los esfuerzos realizados, muchas gracias al profe Retamozo, la preceptora Villagra y al docente de Biología que asistieron al examen por darnos esta buena noticia en medio de una emergencia sanitaria que tiene en vilo al mundo pero que nos obliga a mantener viva la esperanza.
Juan Carlos Andrada.
