En la mañana de ayer, la Asociación Judicial Catamarca (AJUCA), solicitó mediante una nota a la Corte que no suspenda la Feria Judicial de invierno. A la presentación del escrito también se sumaron los autoconvocados. Ya que, a pesar de la pandemia que estamos viviendo, consideran que el servicio de justicia respondió de manera correcta. Además de que se trata de un derecho adquirido por los trabajadores.
Los empleados judiciales elevaron a la Corte su opinión, oponiéndose al pedido realizado por el Colegio de Abogados. En días pasados, dicho Colegio manifestó su preocupación por la situación del servicio de justicia. Ya que, como consecuencia de la pandemia, se creó un extenso período de duración de la Feria Judicial extraordinaria. “La idea no es movilizarnos”, dijo hoy Cecilia Falcón, representante de los autoconvocados judiciales.
Por su parte, los empleados judiciales consideran un tanto exagerado el pedido del Colegio de Abogados. “Nosotros como empleados no consideramos que se haya llegado a una situación grave en cuanto al servicio de justicia. Desde el inicio de la Feria extraordinaria, el personal que prestó servicio presencial fue brindando soluciones a todas las inquietudes, y luego el resto del personal se fue incorporando poco a poco”, declararon.
Además, los referentes de los trabajadores opinaron que los miembros de la Corte “supieron manejar la situación de manera adecuada”. Ya que, por ejemplo, sólo los empleados en situación de riesgo quedaron exentos de presentarse a sus lugares de trabajo, pero que realizan tareas desde sus domicilios para cumplir con el aislamiento preventivo. En el día de hoy habrá una reunión de la Corte que establecerá la fecha del receso invernal para la justicia, y analizará las notas que se han presentado de diferentes ámbitos.
En caso de que la Corte de Justicia haga lugar al pedido del Colegio de Abogados, volveremos a elevar la nota. Apelamos a la solidaridad con los empleados judiciales”, declaró la representante. “Yo creo que si a nivel nacional se paró, y pararon albañiles que vivían el día a día, los abogados por dos semanas no creo que dejen de comer”, concluyó duramente Falcón.