En la jornada de este martes, las declaraciones de Alfredo Cornejo generaron un revuelo en el ambiente político. El presidente de la Unión Cívica Radical afirmó que “Mendoza tiene las características para ser un país independiente de Argentina“. El exgobernador de la provincia recibió diversas críticas y el oficialismo tildó a la idea como una “cortina de humo, parte de un juego divisivo”.
“Podría ser un país pero con un programa común de su élite política empresaria para desarrollar ese camino”, expresó el actual diputado. Cornejo aseguró que se está “obligando a Mendoza a autoafirmarse en sus propios valores e identidades. Estamos lejos de tener autonomía, con nuestra actual estructura productiva, pero creo que hay que empezar a pensarlo seriamente”, insistió.
El oficialismo y otras fuerzas criticaron la postura
El exdiputado y actual presidente del PJ de Mendoza, Guillermo Carmona, inscribió la postura de Cornejo en una “muestra más” de su “juego divisivo” en momentos en que Argentina “necesita unidad”. El exlegislador pidió además “tener muy claro el contexto. No parece que sea casual que estos dichos hayan aparecido en un momento en que la provincia ha entrado en cesación de pagos”.
En tanto, desde la Confederación de Trabajadores de la Economía Popular (CTEP), el dirigente Juan Grabois expresó en Twitter que lo de Cornejo “no es una idea loca de esas que se tiran en una charla de café” sino un “delito grave contra la integridad nacional, el orden constitucional y la vida democrática tipificado en el artículo 226 bis”. A su vez, Ricardo Alfonsín calificó esto como un “exabrupto político-jurídico” esa postura.
“Espero que la dirigencia nacional de mi partido aclare y que de ninguna manera avale un exabrupto político-jurídico como el de Cornejo, que propone desmembrar el país”, dijo Alfonsín en declaraciones a Télam y se eximió de opinar sobre la “cuestión de fondo”, en referencia a Portezuelo del Viento. El hijo del expresidente advirtió que “así no se resuelven los problemas de la nación”.