Según informó el diario El Intransigente, en las últimas horas trascendió la información de que el Fondo Monetario Internacional (FMI) estaría previendo solicitarles tanto a Mauricio Macri como a Alberto Fernández que establezcan un acuerdo entre ellos para liberar el desembolso de USD 5.400 millones previsto para este mes, según lo estipulado en el convenio.
Esto se debería al hecho de que en el organismo multilateral de crédito considerarían que es más que improbable que Juntos por el Cambio gane las elecciones y, por lo tanto, permanezca en el poder otros cuatro años más. Por lo tanto, piensan que el compañero de fórmula de Cristina Kirchner será el nuevo mandatario desde diciembre.
Entonces plantearían a ambos contendientes electorales que lleguen a un pacto político que le brinde al FMI cierta previsibilidad en materia económica y financiera. Desde el ente prestamista piensan que este planteo no es para nada descabellado y que ambos se verán obligados a realizar algún tipo de acuerdo.
Esto se debe a que la Argentina precisa de manera ostensible que se produzca el desembolso de los dólares tal y como estaba previsto porque, de lo contrario, no contará con los dólares suficientes para impedir una crisis sea ya con los mercados o con las propias reservas que resguarda celosamente el Banco Central (BCRA).
Se estima que en el caso de que Mauricio Macri y Alberto Fernández no lleguen a un arreglo, será muy difícil que el FMI ejecute el resto del crédito convenido. Esto sería a pesar de que el Jefe de Estado argentino pida la intercesión del mandatario norteamericano, Donald Trump, quien en los hechos tiene el control del board del organismo.
En los próximos días, el staff del Fondo recibirá al ministro de Hacienda, Hernán Lacunza, quien reemplazó a Nicolás Dujovne en el cargo. Su viaje tiene por objetivo destrabar el desembolso de los USD 5.400 millones y para ello intentará demostrarles que el Gobierno Nacional no incumplió con el acuerdo establecido en su momento.
No obstante, se prevé que el funcionario argentino se encuentre con un escenario adverso a su misión y que como respuesta obtendrá un no. Las razones de esta negativa pasarían por el hecho de que el FMI asumiría que el acuerdo finalmente sí fue incumplido y que llegó la hora de discutir un nuevo tipo de negociación.