Miguel Paulón, Presidente del Centro de la Industria Lechera (CIL), advirtió que el consumo de leche está en baja desde mayo. Dicha reducción se la adjudican a que en ese tiempo “comenzó a notarse la falta de dinero“. Además Paulón criticó la demanda salarial para las empresas lácteas, las cuales “no están bien por problemas de ingresos y precios retrasados”.
Con respecto a esto hizo un análisis positivo en relación al mercado internacional, el cual “está reaccionando un poco y se está colocando todo lo que se puede allí, pero son un poco más difíciles de realizar que en el local”, explicó Paulón. Recordemos que días atrás, las cámaras empresarias de la industria lechera se reunieron con el gremio que representa al sector.
Los empresarios de la leche intentaron acercar sus posiciones con respecto al conflicto salarial a la Asociación de Trabajadores de la Industria Lechera de la República Argentina (ATILRA), pero lamentablemente no llegaron a un acuerdo. No obstante, se llevará adelante una nueva reunión el próximo martes. En este sentido, Paulón dijo que: “Estamos tratando de ver cómo se construye este acercamiento”.
Al momento de hablar de los precios, dijo que “vamos a tener algunas oscilaciones”. Ya que si bien se considera que todo el mundo está pasando por una crisis de demanda, “hay un planteo de comprar menos y pagar con plazos que son, a veces, con alguna financiación”, reflexionó el Presidente del Centro de la Industria Lechera. Quien también consideró que los problemas que afrontan las empresas lácteas se dan “en algunos casos por el imperio del mercado y, en otros casos, por sobreoferta”.
También destacó que la complejidad de la situación se debe a que “el nivel de exigencia salarial que han planteado es bastante demandante para las compañías, que no están bien hace meses y vienen con problemas de ingresos y precios retrasados”. Finalmente, apuntó al último ajuste de precios permitidos por el Gobierno, el cual fue del 3% y criticó que “no alcanza para nada”.