«Esta semana se conocieron los datos del mercado de trabajo correspondientes al segundo trimestre, en el que la actividad se expandió un magro 0,6% respecto al año pasado, fundamentalmente por el contraste de la gran cosecha corriente con la formidable sequía del año pasado», así reconoció la coyuntura el economista y periodista Martín Tetaz en su editorial semanal.
En este contexto, en la sede de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME) se realizó una reunión de las comisiones de Fronteras e Ilegalidad. En este encuentro todos los dirigentes que asistieron determinaron temáticas a tratar para poder mejorar el comercio de las pequeñas y medianas empresas en las distintas regiones que integran la comisión formada para controlar, como su nombre lo indica, las fronteras e ilegalidades.
Con respecto a esto, Germán Bakker, secretario en Calidad de Formación Turística y Fiscalización de Prestadores de la Secretaria de Gobierno de Turismo la Nación, detalló los avances hechos en lo que concierne a la fiscalización de irregularidades en el sector turismo y de los cambios acelerados en las comercializaciones de bienes y servicios con sus consiguientes modalidades de ilegalidad.
«El Estado debería hacer cumplir todas las normativas vigentes, se reciben denuncias y muchas veces se ve imposibilitado de fiscalizarlas por falta de recursos, ejemplo: por internet se ofrecen ofertas de alojamiento ilegales lo cual es muy difícil de controlar», determinó el funcionario que pertenece al equipo del Gobierno de Mauricio Macri.
Invitados por la Cámara de Concepción del Uruguay, participaron dirigentes del Centro Comercial e Industrial de Salto, (R.O.U.) y de la Confederación Empresarial del Uruguay. Los representantes de dichas entidades uruguayas explicaron cómo lograron ganar volumen de ventas de acuerdo con las rebajas tributarias, por lo que propusieron replicar el mismo sistema en Argentina. «El contrabando vale la pena mientras se sienta en el bolsillo, a igualdad de precios pierde sentido», manifestaron.
«Contrabando de cigarrillos: Se estima que se pierden montos cercanos a los 2 millones de pesos por evasión fiscal en cada cargamento que ingresa ilegalmente por lo que se puede apreciar el grave perjuicio fiscal ocasionado. Por otra parte, se está analizando la composición de los cigarrillos ilegales para conocer el grado de daño a la salud resultante a su consumo para que sea tratado como un tema de salud pública y no solamente como una cuestión económica. Se captura solo uno de 10 de los envíos clandestinos», detallaron.
Por otro lado, también analizaron que «con Paraguay se revirtió la tendencia, es más barato para ellos venir a comprar a la Argentina, dado esto, dicho país aplicó la tolerancia cero al ingreso de productos argentinos, lo que significa que los ciudadanos paraguayos no pueden llevar a su país nada que fuera comprado en Argentina». Este control se establece por medio de nuevos impuestos planteados por el país vecino.
