Con el dólar transitando su octava semana consecutiva estable, la inflación cediendo, la actividad recuperándose desde el interior y las cuotas paritarias empezando a recuperar un poco los bolsillos. Todo esto marca el contexto en donde Martín Tetaz, analista económico y periodista realiza su análisis de la realidad actual, el dólar, el riesgo país y los mercados.
«Cuando se descompone el índice en sus tres preguntas principales, la impresión respecto a la situación macroeconómica está un 30% por encima de la de junio del 2018, al tiempo que la percepción de la gente sobre su situación personal está 12% mejor que hace doce meses. Lo que no termina de hacer pie es la predisposición a la compra de bienes durables e inmuebles que, todavía queda 25% por debajo de los niveles que había en 2018 y resulta un 36% inferior a la del 2017», dijo Tetaz.
El analista expresó que desde la Economía real se confirmó una recuperación de la actividad económica, lo cual es la causa de la estabilidad cambiaria que se empezó a notar en la calle, tal y como lo releva el índice de expectativas de los consumidores, que está un 11,2% arriba del mes pasado y 12,7% mejor que junio del año pasado, según un estudio de la Universidad Di Tella.
«Después de haber empezado la semana mal, copiando la suba de emergentes, el riesgo volvió a ceder el jueves y viernes, cuando se conocieron los buenos datos del comercio exterior, la madurez del acuerdo con la Unión Europea y el producto de la reunión entre Trump y el presidente chino», destacó, mientras que aclaró la importancia de ese cierre, ya que, «si el riesgo volvía a niveles de 900 puntos le ponía presión al dólar y amenazaba con enfriar la mejora en las expectativas de inflación».
En cuanto a la moneda internacional, el dólar, Tetaz demostró que bajó casi 40 centavos en la semana y el clima en el mercado se puede resumir en un tuitero que esta semana dijo «43 es el nuevo 45». «La explicación hay que buscarla por el lado de la abundante oferta de liquidaciones combinada con tasas reales en pesos cada vez más altas por las expectativas de inflación que se pinchan más rápido que la caída de las tasas nominales», añadió.
«La economía siguió expulsando empleo en abril, el sector privado registrado perdió 10.800 asalariados en el mes y 141.000 en el año. La caída del mes fue completamente compensada por el aumento de 11.000 puestos en el sector público. En términos proporcionales el empleo asalariado registrado cae 2,2%», complementó teniendo en cuenta los índices del INDEC lanzados anteriormente.
En lo que respecta al ajuste necesario para poner en orden los números del país, el analista opinó que «el ajuste de la economía es más por precios que por cantidades, lo que se refleja en la caída del salario real de prácticamente un 10% en los últimos 12 meses». Ya que, en abril, de acuerdo con el índice de salarios del Indec, todos quedaron debajo de la inflación. Los trabajadores registrados del sector privado tuvieron en promedio aumentos del 2,8% mientras que el mayor ajuste recayó en estatales, que solo mejoraron 2% e informales, que solo subieron 1,2%.
