El diario El Intransigente dialogó con el actual diputado nacional por el espacio Consenso Federal y candidato a ser reelegido, Marco Lavagna se refirió a la nueva crisis que atraviesa Argentina. En este contexto, refirió que la situación económica «es complicada desde hace tiempo y que la serie de medidas tomadas por el Presidente son positivas para enfrentar lo desatado por los mercados financieros».
Luego de que se produjera la corrida cambiaria post elecciones primaras, el dólar mantuvo durante tres días una escalada que llevó a la devaluación del peso en torno del 33%. Esto provocará una disparada de la inflación que elevará los precios de los productos alimenticios y de limpieza que conforman la canasta básica.
En ese contexto, el economista dialogó con FM Concepto y manifestó que «en los últimos días lo que hemos visto es que la política de parches que se venía llevando adelante, tarde o temprano revienta, lo que vimos es parches reventando». Además, opinó que la política económica desarrollada por el oficialismo «no funciona».
Asimismo, comentó que la administración de Mauricio Macri «no ha corregido los problemas estructurales que tiene, pero también es una crisis política institucional importante». Luego agregó que «hace falta ante todo llevar un poco de calma y tranquilidad y lograr metas de diálogo y consenso para empezar a encaminar y corregir las cosas».
Además, el hijo del candidato presidencial, Roberto Lavagna, criticó el «mensaje que dio el propio Gobierno» al día siguiente de producidas las PASO. En ese sentido, dijo que fue «irresponsable cuando dijo ´si no ganamos nosotros, viene el cuco` y eso genera, sobre todo por parte de la máxima autoridad del país, siempre un grado de intranquilidad; los resultados se ven a la vista».
De aquí en adelante, el actual congresista explicó que «lo importante es que el Gobierno pueda mostrar que tiene la situación más o menos controlada, que ya le encontró el rumbo de cómo va a salir». También consideró que «lo importante son las señales, más allá de que las medidas económicas son fundamentales, pero también debe tener un basamento de expectativas positivas».
Para finalizar, aseveró que «toda medida que lleve un alivio al bolsillo es positiva, el problema es que a los tres meses se licúan», comunicó refiriéndose a las iniciativas adoptadas por el Poder Ejecutivo. Y recordó que varias de las acciones formaban parte de un conjunto de propuestas realizadas por su espacio en un contexto diferente al actual.
