Otra complicación aparece para el tratado de libre comercio que fue acordado por ambas partes a finales de junio en Bruselas, Bélgica. Aunque fue recibido por gran regocijo, sobre todo por Brasil y Argentina, principales involucrados en el logro, algunos países de la Unión Europea (UE) han expresado su rechazo. Según el diario El Intransigente, en esta oportunidad fue Austria.
Según consignó la agencia de noticias Télam, este jueves el Parlamento austríaco aprobó una moción que obliga a que el gobierno prohíba ante la Comisión Europea la aprobación del acuerdo comercial entre el mercado sudamericano y el europeo. El veto fue avalado por casi la mayoría de los diputados, ya que sólo uno se negó a votar. Asimismo, la propuesta fue aceptada por casi todos los partidos que conforman la cámara. El único que todavía apoya el tratado es el liberal Neos, pero aun así pide algunos cambios.
El partido socialdemócrata SPO calificó la votación como «un gran triunfo para los consumidores, el medioambiente, la protección de los animales y los derechos humanos», de acuerdo a la información de Télam. Los conservadores del ÖVP, fuerza con la mayor cantidad de diputados, el ultranacionalista FPO, e incluso Los Verdes, (ambientalistas) que no están en el Parlamento, aplaudieron la decisión, estos últimos han calificado al acuerdo como «nocivo».
«Austria rechazará el tratado del Mercosur», se felicitó la diputada conservadora y exministra de Medio Ambiente, Elisabeth Köstinger, según citó la agencia NA. Además, criticó los incendios en los «bosques tropicales» en Sudamérica «para crear pastos y enviar carne de vacuno barata a Europa». La moción fue aprobada a tan sólo 10 días de las elecciones legislativas, las cuales se anticiparon por la caída del gobierno de coalición de derecha.
El tratado de libre comercio entre el Mercosur y la UE fue producto de 20 años de negociaciones que finalmente pareció que tuvieron sus frutos. Sin embargo, en las cuestiones técnicas y minuciosas del mismo, algunos países han presentado sus críticas por la duda que representa si el acuerdo beneficiará a una parte más que otra. De momento, el acuerdo no ha sido en su totalidad vetado, pero tampoco tiene el visto bueno.
Además, todavía resta la revisión jurídica antes de que los miembros de la UE decidan hacerlo formal. «Ambas partes están llevando a cabo lo que se denomina una revisión jurídica del texto acordado para llegar a la versión final (…) Por lo que, básicamente, la ratificación aún no comenzó», explicó la vocera de la Comisión, Mina Andreeva. Un alto funcionario europeo reveló a la AFP, que la firma oficial podría darse en el otoño boreal de 2020.
No sería la primera vez que un país bloquea el aval de un acuerdo comercial. En 2016, la región belga de Valonia vetó por varios días la firma del tratado entre la UE y Canadá. Del mismo modo que Austria hoy se opone, anteriormente han expresado su rechazo países como Francia, Irlanda y Bélgica. Una de las reticencias nace en la defensa del sector agrícola y avícola. Además, la cuestión de los incendios forestales en la Amazonía brasileña molestaron a los europeos, como al presidente francés, Emmanuel Macron, quien mantuvo un conflicto por esta cuestión con su homólogo brasileño, Jair Bolsonaro.