Leo Bilanski, presidente de la Asociación de Empresarios Nacional (ENAC) analizó la difícil situación que atraviesa el sector de las pymes y el impacto de la crisis económica. En declaraciones a El Intransigente, el dirigente empresarial pidió que se declare la emergencia nacional en el rubro: «Se tienen que tomar medidas excepcionales para las pequeñas y medianas empresas».
Este jueves el Consejo Directivo de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME) pidió que se declare la emergencia pyme en todo el país, en medio de la incertidumbre económica y política que atraviesa la Argentina. Además, reclamaron a la dirigencia política el compromiso durante los próximos meses para trabajar en función del mantenimiento de los puestos de trabajo.
En declaraciones a El Intransigente, Bilanski explicó que el pasado 8 de marzo se presentó un proyecto en el Senado de la Nación para declarar la emergencia pyme. Si bien la normativa tuvo tratamiento en comisión, no llegó a tratarse en el recinto ni tampoco aparece en la agenda legislativa: «Creemos que es urgente que se trate porque la situación del sector es dramática».
«Pedimos que se declare a nivel nacional de una vez por todas, pero los tiempos del Congreso están más ligados a los tiempos electorales que a la pequeñas y medianas empresas y al sector de los trabajadores. Eso es una deuda pendiente de la democracia para con los ciudadanos, van a dos velocidades distintas, realidades que en este caso no son compatibles», evaluó.
El dirigente explicó que la normativa presentada en el Congreso propone una serie de medidas excepcionales para el sector como la retracción de tarifas, la suspensión de embargos y líneas de créditos a tasa accesible. No obstante, el referente de ENAC consideró que va a ser difícil poder impulsar su tratamiento en el Congreso a poco más de un mes de las elecciones generales.
«Nosotros no vemos que en el corto plazo el Senado avance con esas iniciativas, sobre todo porque estamos aun mes de las elecciones presidenciales. Entiendo que estamos más cercanos a que se disuelvan los proyectos y el próximo Poder Ejecutivo impulse las medias por decreto o un nuevo paquete legislativo a que estos proyectos puedan ser tratados», evaluó.
Por último, Bilanski analizó el impacto de la crisis en las pymes y el sector industrial: «Se perdieron 24 mil pymes en tres años y medio. Auguramos que frenar esta destrucción de pymes y esta recesión va a llevar por lo menos un año. Después empieza un proceso de construcción y tratar de recuperar el entramado productivo que se perdió en este tiempo».