Al igual que todos los ministros de la gestión macrista, la líder de la cartera de Seguridad, Patricia Bullrich, ya se prepara para lo que será el fin de su cargo con la llegada del cambio de gobierno el 10 de diciembre. Ante esto, Bullrich no dijo cómo continuaría su vida política pero sí se animó a decir que le gustaría estar al frente de PRO. “Es un proceso que debe ser consensuado y discutido”, reconoció.
“Me gustaría que mi nuevo rol sea ser presidenta del PRO. Hasta que no se resuelva, no voy a decir nada”, expresó, en diálogo con el programa radial Novaresio910. Por otro lado, la actual ministra de Seguridad se refirió al conflicto que se vive en Bolivia y las amenazas que sufrieron los periodistas argentinos que cubrían el tema. “La gran pregunta que nos hacemos todos es si habrá una autoridad objetiva que pueda garantizar que el proceso electoral se realice bien, no como sucedió antes”, estableció.
Sobre los profesionales de la información, rescatados por Gendarmería, Bullrich precisó que “ya están en el aeropuerto esperando el avión rumbo a Argentina”. A pesar de que el operativo fue exitoso, la líder de la cartera de Seguridad no dejó de señalar que el pasado jueves fue “un día complicado”. “Tuvimos que ir a buscar a los argentinos. Ya están a la espera del vuelo”, añadió.
“No hemos tenido, de parte de la embajada, un pedido de otros traslados. Hemos mandado 11 oficiales del cuerpo de Alacranes”, informó la funcionaria. Así, el rescate de los periodistas se dio sin ningún tipo de complicaciones. Ante este tema, el conductor del programa, Luis Novaresio, interrogó a la ministra sobre la posición que tomó el Canciller, Jorge Faurie, al no catalogar el conflicto boliviano como un golpe de Estado.
“No quiero entrar en contradicciones, no quiero que me digan que digo cosas distintas a mi Gobierno”, fue la respuesta de Bullrich, adelantándose a las repercusiones de sus palabras. “Hoy tenemos una situación de riesgo con la gente que está en la embajada. Estamos tomando medidas para ayudar en lo que se pueda”, añadió la ministra. Mientras tanto, en Bolivia se autoproclamó presidente interina la vicepresidente segunda del Senado, Jeanine Áñez.