El pasado viernes 13 de diciembre se publicó en el boletín oficial de Argentina el nuevo protocolo de Interrupción Legal del Embarazo. El mismo realiza una actualización a las anteriores medidas y suma a la derogada por Mauricio Macri. El impulsor de esta idea fue el ministro de Salud, Ginés González García, quien en una entrevista radial dio su opinión al respecto.
En el comunicado que se publicó en el Boletín Oficial se expresa que: “Este protocolo tiene como objetivo ofrecer una guía a los equipos de salud para que cumplan con su responsabilidad en la interrupción legal del embarazo contemplado en el marco jurídico argentino. Se basa en la mejor evidencia científica disponible y en la experiencia de implementación de versiones anteriores”.
En cuanto a la medida, el flamante nuevo ministro de Salud del gobierno de Alberto Fernández aclaró: “El protocolo no es más que una guía sanitaria para el personal médico involucrado en esas prácticas consagradas en el Código Penal desde 1921. A través de esta decisión se da cumplimiento al fallo que la Corte Suprema dictó en el 2012”.
Esto trajo muchas críticas de distintos ámbitos conservadores y de la Iglesia Católica. El ministro disminuyó estas posturas y aseguró: “Los antiderechos siempre usan cualquier tipo de argumentos y hasta la Justicia para que no se cumpla la ley. A pesar de todo voy a trabajar para que se cumplan las leyes vigentes: la de Educación Sexual, la de Salud Sexual Reproductiva”.
Por último, el funcionario de la nueva cartera de Salud agregó: “Somos respetuosos, pero no puede ser una coartada para que no se cumpla la ley. La misma respeta la objeción, pero no puede quedarse sin respuesta institucional. Sabemos que hay instituciones que colectivamente han intentado hacer esto y obviamente lo que plantea es lo que se dice la”.