En el último tiempo, los paros de colectivos fueron moneda corriente en diversos puntos del país, debido a la quita de subsidios y a la falta de pago por parte de los empresarios. Este lunes, un sector de la UTA había anunciado una retención de servicios para este martes 11 de febrero. A pesar de esto, el secretario general del sindicato desautorizó esta medida y garantizó la circulación.
Bien temprano, en la mañana de este martes, el dirigente Miguel Bustinduy dijo que el paro de colectivos se cumpliría en todo el país en reclamo de mejoras salariales y laborales, lo que podría afectar a miles de personas. La medida, según anunció el dirigente, abarcaría a todas las líneas, aunque existían dudas sobre el nivel de acatamiento que tendría.
“La UTA es ajena a todos los problemas que tenemos. Hay una pérdida que viene del Gobierno de Macri con la complicidad de Roberto Fernández. Perdimos el 50% de nuestro poder adquisitivo, no tenemos obra social, precarización en todas las áreas. Da mucha pena porque nuestra organización siempre estuvo a la vanguardia de los derechos de los trabajadores”, agregó.
Pero la conducción oficial de la Unión Tranviarios Automotor desconoció el paro, y este martes se verá si tiene algún nivel de acatamiento. El titular del gremio dijo que está en curso la negociación salarial con el gobierno y los empresarios. Es una paritaria de interés nacional ya que es un sector que está directamente influenciado por el reparto de subsidios.
Fernández dijo que el sector que lanzó el paro es minoritario y sin representación en el gremio. “Hay una sola Unión Tranviarios Automotor y nadie puede arrogarse representación cuando su accionar es contrario a la ley y al estatuto”, advirtió. A mediados de diciembre, hubo un violento enfrentamiento entre ambas facciones en la sede gremial en Balvanera, por lo que hubo ocho heridos y destrozos en el edificio.