Aaron Hernández fue un jugador profesional de fútbol americano en los New England Patriots de la NFL. En 2015 fue condenado a cadena perpetua por el homicidio de Odin Lloyd. El asesinato ocurrió el 17 de junio de 2013. Lloyd era un futbolista que salía con su cuñada. Hernández lo mató de 6 tiros. Los motivos nunca fueron claros y la historia se puso más turbia.
El 2017, el futbolista fue absuelto de la mayoría de sus cargos, sin embargo, tomó la decisión de quitarse la vida. Se ahorcó en su celda. Los médicos descubrieron que padecía de encefalopatía traumática crónica avanzada. Esto es común en futbolistas y boxeadores. Esta condición puede provocar cambios en el humor de las personas que lo padecen, además de una conducta impulsiva y dificultad para pensar.
Netflix recogió esta historia para hacer una miniserie que cuenta con 3 capítulos que duran alrededor de una hora cada uno. “El asesino oculto: En la mente de Aaron Hernández” es una “docuserie sobre Aaron Hernández, la promesa de la NFL que tuvo un final trágico, contada a través de entrevistas con sus amigos, jugadores y testigos”, dice la sinopsis de la plataforma.
Fue dirigida por Geno McDermott, quien también estuvo a cargo de “Man behind the curtain“. La serie busca retratar cómo el atleta pasó de tenerlo todo a su trágico final. Aaron fue seleccionado por la NFL cuando tenía 20 años y fue considerado de los más talentosos de la liga. Según sus cercanos solía ser una persona amable pero se transformó en una “bomba de tiempo”.
El deportista fue sumado a la lista de atletas de fama mundial que se convirtieron en criminales, lista que también ocupan Oscar Pistorius y Carlos Monzón. La serie se estrenó el miércoles 15 de enero y tuvo sus primeras críticas. Según la audiencia en general, la producción es atrapante. Pero los 3 capítulos se pasan volando.
