Luli Fernández sufrió un violento robo en su casa hace 5 días. En ella vive con su marido, el abogado Cristian Cúneo Libarona, y con su hijo de un año, Indalecio. Los ladrones apuntaron a la familia con armas de fuego y los delincuentes amenazaron con secuestrar al pequeño. Hoy se supo que dos hombres fueron detenidos, acusados del hecho. El periodista de Crónica HD, Germán Mónaco, dio la noticia en su cuenta de Twitter.
El reportero difundió cuatro imágenes de un allanamiento y el arresto de los sospechosos. En total se habrían allanado tres viviendas en operativos realizados por el personal de la Subdelegación Departamental de Investigaciones de San Miguel, en las localidades de José C. Paz, Moreno y Los Polvorines, en la provincia de Buenos Aires. Las pesquisas dieron con dos hombres. Leonardo Ocampo y Marcelo Viera serían las personas que entraron en la casa de Luli. Una mujer, que estaría vinculada a ellos, también está en la mira policial.
En las fotografías se observa la tarea de los efectivos de seguridad. En uno de los hogares de los acusados de cometer el robo el martes pasado se hallaron algunas de las pertenencias sustraídas a la modelo. Entre ellas se encontraba un portacosméticos marca Regina, que utiliza habitualmente para trabajar. Sin embargo, tres relojes de alta gama que denunció que le habían robado no fueron encontrados. Se sospecha que habrían sido vendidos rápidamente después del robo.
Un auto fue la clave
Asimismo, se secuestró el auto Ford Fiesta blanco que habría sido usado para cometer el delito. El vehículo fue precisamente la pieza clave para dar con los sospechosos. Según se explicó en el programa de América, Luli Fernández y su marido no lograron ver los rostros de los delincuentes porque llevaban tapabocas, pero sí pudieron reconocer el vehículo en el que se desplazaban. A raíz del trabajo de los investigadores y con la revisión de las cámaras de seguridad de la zona, la Policía pudo reconstruir el trayecto de los ladrones.
Los investigadores del robo le adelantaron Luli Fernández la posibilidad de que dieran con los delincuentes ya que, debido a la poca circulación vehicular que hay por estos días por la cuarentena obligatoria, no era demasiado difícil seguir el recorrido del Ford Fiesta. Si bien confían en que el caso está casi esclarecido, todavía falta una medida pericial clave: la ronda de reconocimiento. Es un hecho que puede tener sus complicaciones ya que no hay certeza de que la modelo y Cúneo Libarona puedan identificarlos adecuadamente.