En 2019 sacaron 8 hermanitos por maltrato en Tinogasta y ahora los devuelven al mismo lugar bajo el cuidado de la misma persona violenta, sin modificar ni cambiar nada. Los niños entre 7 y 18 años fueron enviados a instituciones dependientes del Estado en la Capital de Catamarca, pero ahora retornan por disposición de la jueza Almendra, sin una sola visita social ni haber escuchado nunca a los pequeños. La historia contada por El Aconquija.
En sentido contrario y sin modificar nada, la justicia procede de manera incomprensible e ilógicamente. Si los funcionarios judiciales le sacaron a la abuela los niños de Tinogasta por maltrato, quiere decir que tenían los fundamentos para hacerlo y no pueden hoy devolverlos sin modificar ese contexto perjudicial que originó la primera decisión, o proporcionarles otra realidad. Lo que no puede hacer la justicia es sostener decisiones contrarias sin que se le caiga la cara de vergüenza.
Si se equivocó y por eso devuelve los niños a Tinogasta, alguien debe hacerse cargo de tamaño daño al separar a los chicos de la abuela cuando en realidad no estaban sufriendo maltrato (y por eso hoy los devuelven). Sin embargo, recordemos que la denuncia fue realizada por los docentes de la escuela a donde concurrían los niños, y luego los maltratos fueron constados por la Subsecretaría de Familia, organismo provincial que intervino para supuestamente “salvar” a los chicos.
Un matrimonio intenta recuperarlos a los chicos pero tienen la negativa de la justicia que insiste con entregárselos a la abuela que tiene 76 años. El objetivo sería no separarlos y que permanezcan juntos, algo que se pudo en parte porque estaban alojados en distintas instituciones a la espera de volver a verse con los hermanos tras la resolución de la justicia que tienen tiempos largos y además decisiones enredadas y absurdas.
“Es un caso de maltrato infantil, que es un flagelo y que tenemos muchos en Catamarca, no solo maltrato físico, sino psicológico” manifestó en ese momento la Dra. María Carrizo agregando: “Vamos a combatir el maltrato infantil desde esta Subsecretaría, tenemos que abandonar la idea que el castigo físico y otras ideas humillantes son necesarios para inculcar disciplina, ese es un paradigma anterior y viejo”.
