Connect with us

Hi, what are you looking for?

Capital de Catamarca

Información general

Es diabético y ciego, esperó 11 horas en la Capital de Catamarca por un estudio que nunca le hicieron

En este momento está esperando que le devuelvan la plata porque lo primero y único que hicieron fue cobrarle 22 mil pesos.

Cuando la salud pública no responde, los vecinos catamarqueños tienen que ir al sector privado pagando altos costos, pero esto no significa eficiencia. David Visconte, es diabético, está ciego y tiene afectados los riñones, esperó 11 horas por un estudio pagado en el ICI de la Capital de Catamarca. No le convidaron ni agua. Nadie le dio una explicación razonable. En este momento está esperando que le devuelvan la plata porque lo primero y único que hicieron fue cobrarle 22 mil pesos.

Visconte es de Andalgalá. Viajó a la Capital de Catamarca para hacerse un estudio relacionado con las arterias porque tiene lastimado un pie y el miembro inferior no está bien irrigado por lo que no sana. La diabetes lo dejó ciego y comprometió seriamente sus riñones. Se dializa en el hospital San Juan Bautista, pero lo que no puede hacerse en la salud pública debe hacerse en las clínicas privadas pero ni aun pagando por anticipado pudo cumplir el objetivo principal del viaje,

David tenía turno a las 9 de la mañana del miércoles 3 de marzo. A las 20 horas todavía espera, no solo no pudo hacerse el estudio sino que no le devuelven la plata. Visconte asentó una queja formal en el ICI por los inconvenientes y la irregularidad del sanatorio privado que no tuvo ninguna contemplación ni gesto por su estado de salud. Ni comida ni agua. No le dieron nada. En realidad, le hicieron perder el tiempo y le provocaron un muy mal momento.

David no se quedó callado ante la injusticia que le tocó vivir en la Capital de Catamarca. Esto más sabiendo que estar en un hospital tanto tiempo en medio de una pandemia es peligroso, ya que hay riesgo de contagio. Por esta razón, el hombre oriundo de Andalgalá procedió a dejarle una larga carta a las autoridades del sanatorio privado, la misma fue escrita por su pareja Jesica Ormachea.

En el escrito se puede leer: “No consideraron mi estado de ceguera total. Viajamos más de 300 kilómetros desde Andalgalá para llegar hasta acá. Tampoco tuvieron en cuenta que con este viaje mi acompañante perdió horas de trabajo, eso si nombrar todos los gastos que corrieron por nuestra cuenta para llegar hasta la Capital de Catamarca. Queremos que nos devuelvan el dinero que se nos adeuda en tiempo y forma”.

Click to comment

Leave a Reply

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *