Alberto Fernández, presidente electo en las últimas elecciones por Frente de Todos, se refirió a la situación en Bolivia. Se mostró totalmente en contra de que Evo Morales abandonara su país. Además, criticó duramente la participación de Estados Unidos y de Donald Trump en el hecho.
En diálogo con medios nacionales, se refirió primero a la acción iniciada por la OEA ante las elecciones en Bolivia. “Es una verguenza lo que hizo la OEA. Su auditoría era muy endeble y sus resultados estuvieron manipulados. Aún así, Morales aceptó ir a elecciones de nuevo”, declaró Fernández. “No se entiende la razón del golpe de Estado”, agregó.
“Cuando iniciaron las elecciones nuevamente, se encontró con un golpe de Estado”, volvió a remarcar el presidente electo. Explicó que todo se dio “por la rebelación de las Fuerzas Armadas y la Policía“. También mostró su disconformidad con lo que publicó el Gobierno de los Estados Unidos. “No hay ningún ejército victorioso como planteó ese gobierno americano”, exclamó Fernández.
“No es verdad que el gobierno de Bolivia haya garantizado la democracia. En todo caso la impidió”, añadió el abogado. “Hay millones de bolivianos que votaron algo y eso está siendo desatendido”, agregó. Dio su opinión acerca de la situación social y política del continente, diciendo que “todo lo que pasó en el último tiempo fue malo”.
Por último, se refirió al rol argentino de garantizar la seguridad de Morales y sus ministros. “Tuvimos dificultades para garantizar la seguridad del presidente boliviano, de su vice y de sus ministros”, afirmó Fernández. “Estados Unidos retrocedió décadas ayer. Volvió a los tiempos cuando avalaba intervenciones militares contra gobiernos populares elegidos democráticamente”, finalizó.