Desde hace mas de un mes, Chile vive momentos de tensión absoluta y a pesar del llamado a reformar la Constitución, esta tensión no para. En el inicio de esta semana, las protestas en las calles volvieron a explotar y así también la represión. El Presidente Piñera intenta buscar la paz llamando al diálogo a las organizaciones sociales y a los partidos políticos.
Este miércoles 27 de noviembre, las calles del vecino país volvieron a amanecer en medio de un desastre. Lugares públicos fueron destruidos, comercios saqueados y demás sucesos que dejó una noche violenta. Todo esto se da en medio de la tensión que viven los chilenos, y que hasta el momento no se encuentra una solución que vuelva a traer tranquilidad para todos.
La semana pasada te informamos que Amnistía Internacional había sacado un informe en donde expresaba que las fuerzas de seguridad chilenas tuvieron excesos en las represiones en el país vecino. Desde el gobierno de Piñera salieron a responderle al comunicado de la organización, y lo tildaron de irresponsable y que no reflejaba la realidad, siguiendo adelante con la relación antagónica entre ambas fuerzas.
Esto trajo consecuencias, ya que los propios chilenos en descontento con las medidas y apoyando el informe de Amnistía, salieron a las calles a reclamar. Cabe recordar que, durante esta semana, se cortaron rutas con barricadas durante el día. En la noche del martes, encapuchados realizaron diferentes destrozos en diferentes comercios y espacios públicos.
Mientras tanto, el primer mandatario de la nación llamó a la Mesa de Unidad Social, para retomar el diálogo con ese bloque que reúne a más de 150 organizaciones sociales chilenas. En esa reunión, el gobierno busca acordar un documento titulado “Pliego de los y las trabajadoras de Chile”. En el mismo se puede observar nuevos derechos para los ciudadanos, como un salario mínimo de 650 dólares, efectivo derecho a huelga y demás.
