Las condiciones de higiene y salubridad en general se ve que no son una prioridad en el municipio. Se está terminando de construir un matadero frente a una planta cloacal de Andalgalá. Es decir, que la carne que los catamarqueños van a consumir estará sumamente expuesta a lo que provenga de los desechos expedidos de las cloacas.
Como dato importante, el intendente de la localidad implicada, Alejandro Páez, es cabeza de lista como candidato a diputado por Juntos por el Cambio, dado que finaliza su mandato este año. No se están respetando las condiciones básicas de higiene en las que se debe trabajar con alimentos en estos casos por parte de su gobierno.
Parte crucial de la aprobación de este inminente proyecto son los concejales, quienes al parecer no se percataron de los inconvenientes de tratar carne frente a una planta de tratamientos cloacales. Aunque la construcción ya está bastante avanzada, hay que ver si el SENASA aprueba o no estas condiciones de faneamiento de carne para su posterior consumo.
Por otra parte, llama la atención el cambio en las cifras del presupuesto que costó el matadero. Se comenzó con una suma de dinero invertida de $4.000.000 y finalmente, ese monto subió a $37.000.000. ¿De dónde salieron esos fondos restantes para la financiación de ese proyecto? ¿Se habrá puesto todo ese capital en la obra?
Como fondo de todo, queda la duda de qué se hace con el dinero obtenido de regalías minera, proveniente del proyecto de oro, cobre y molibdeno “Bajo de la Alumbrera”. Esta actividad ya terminó, luego de la explotación a lo largo de 20 años de estos recursos de la minería en la provincia.