La directora del Hospital San Juan Bautista de la capital catamarqueña, Silvia López, habló sobre una “fallas” que sufre el tomógrafo de dicho hospital. Pero estas explicaciones no dejaron conforme a nadie que las haya escuchado. Dice que existe una unidad encargada del artefacto que no encuentra la falla, por lo que es”una situación muy extraña” según ella.
Si bien se puede desconocer el funcionamiento o el lenguaje técnico empleado para referirse a cuestiones tecnológicas, no puede salir la máxima autoridad de una institución de Salud Pública como lo es el hospital a dar esa explicación. Es decir, que prácticamente se le atribuía la falla del tomógrafo a algo de índole “sobrenatural”. Una falta de profesionalidad enorme.
“Cada tanto da un error que ellos no pueden solucionar. Anoche habría fallado y hoy a la mañana ya funcionaba normalmente. Una cosa extraña“, declaró López a medios locales dando una excusa que roza lo ridículo. Que una unidad especializada financiada por Salud no pueda hallar una falla técnica es grave, pero que una autoridad declare esto es aún peor.
Por otro lado, la directora del recinto alegaba que algunos desperfectos podían deberse a sus 10 años. “Si bien el tomógrafo tiene ya 10 años, cada tanto tiene sus fallas pero está funcionando”, explicó Silvia López. Esto es grave teniendo en cuenta que el instrumento es utilizado para gran cantidad de estudios, y no se puede permitir que tenga fallas.
Este tipo de actitudes no se deberían pasar por alto desde el Ministerio de Salud de la Provincia. Relatos de este tipo por parte una máxima autoridad no pueden aceptarse, porque son tomados como una falta de respeto hacia la población. La gente necesita certezas a la hora de hacerse tratar en Salud Pública, no que desde las autoridades les transmitan más dudas.
