El departamento catamarqueño de Tinogasta vive una situación crítica con respecto al estado del agua que se califica como “potable”. Según denuncian los vecinos ante El Aconquija, este tan preciado recurso muchas veces llega a sus casas con renacuajos. Este hecho habla de las malas condiciones en las que se encuentra la planta potabilizadora y la falta de tratamiento sobre el agua para convertirla en apta para consumo humano.
A raíz de esta situación, los vecinos de Tinosgasta se presentarán, la semana próxima, en la justicia. Mientras tanto, la población permanece intranquila ante la mala calidad del agua que sale de sus canillas e incluso ante la presencia de renacuajos. Las razones de este problema serían, nada más y nada manos, la falta de mantenimiento de la planta que se encarga de tratar el agua y las del tanque de la villa.
En comunicación directa con los vecinos, El Aconquija escuchó sus denuncias y recibió las imágenes que prueban la mala calidad del agua y la presencia de estos organismos. Sin embargo, aún con estas pruebas, el problema es negado por los responsables del saneamiento del agua, la Dirección de Agua y Saneamiento del Interior (DASI). Este problema no solo se vive en Tinogasta sino que la mayoría de los departamentos del interior de Catamarca reportan casos similares en donde el agua no se presenta en condiciones para ser utilizada.
Por otro lado, otra cuestión que también dificulta el acceso de la población a agua de la calidad son los cortes de este suministro durante el verano, época del año en donde más se necesita. Las plantas se alimentan de los ríos, sin embargo, durante esta estación, cuando llueve y crecen los cuerpos de agua, se cierran las compuertas y la planta se queda sin agua para tratar y después destinar a los hogares.
De esta forma, la distribución de agua es sectorizada por barrios y los vecinos viven las consecuencias de no contar con este recurso. Ya no se puede acceder a agua para cocinar, lo que afecta la economía de los hogares, ya que se debe comprar este recurso en su versión embotellada. Además, los baños no pueden higienizarse y la única forma de conseguir este líquido es caminando largas distancias. Así, la falta de agua y la mala calidad de esta se configura como uno de los problemas más graves y peligrosos del interior de Catamarca.
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