El domingo 8 de diciembre, a partir de las 18.30, se realizará una Solemne Procesión en honor a la Inmaculada Concepción, en su advocación del Valle.A su culminación, se realizará el lanzamiento del Año Jubilar por los 400 años de la presencia de la Virgen del Valle entre nosotros. En esta fiesta se congregan miles de fieles que llegan desde distintos puntos del país, especialmente desde Tucumán, Santiago del Estero y Salta.
El problema en esta oportunidad yace en la falta de controles que hay, y en el exceso en los precios. Se termina transformando en un abuso a la gente que llega a Catamarca empujada por su fé y devoción. Los anfitriones parecen aprovecharse de ese para duplicar los precios y la bebida, y los demás objetos que venden durante la festividad. Todo esto termina en un maltrato al creyente.La zona está totalmente liberada de inspecciones, y las quejas son recurrentes.
Además, a pesar de haber toda una logística que organiza y colabora con la asistencia de los peregrinos, se producen accidentes en la ruta y otros problemas. El director de defensa civil, Martín Castelli, comentó que ya se auxilió a un hombre que quería llegar para los festejos, peor sufrió una luxación de hombro, a una mujer con un cuadro de hipotermia, y otro hombre que tuvo un preinfarto y fue trasladado por el SAME al Hospital San Juan Bautista.
Cabe destacar la ayuda de otros fieles que colabora con agua y frutas, y el establecimiento de carpas con enfermeros, para que esta fiesta sea lo mejor que pueda ser, y estas fiestas se sigan celebrando año a año. También se intenta que la ruta sea lo más segura posible, y que quienes transitan lo puedan hacer con la tranquilidad de que llegarán bien a destino.
El turismo religioso es parte de nuestra provincia, cada año se acercan muchos turistas para profesar su fe, y otros curioso a ver semejante congregación y muestra de afecto hacia la Virgen. Debemos cuidar a nuestros visitantes, y velar por su seguridad y el correcto cobro de precios razonables, evitando que estén a merced de la voluntad de quienes venden, y no pagando lo que realmente corresponde.