Según reza el parte oficial de la prensa de Raúl Jalil, en la mañana de hoy, el ministro de Gobierno, Justicia y Derechos Humanos, Jorge Moreno, recibió en su despacho a los legisladores de ambas cámaras para delimitar el temario de las Sesiones Extraordinarias previstas desde el 1 de febrero hasta el 31 de Marzo.
En la reunión se informó a los legisladores de los aspectos generales de los proyectos que se van a remitir al Poder Ejecutivo. Los que se basan en asuntos referidos a cuestiones del Estado Provincial en general, desarrollándose aspectos técnicos de estos y proyectos referidos a cuestiones de envergadura en lo social.
En total, se abordaron 12 proyectos de ley, de los cuales tres se agregaron en esta reunión por sugerencia de los legisladores. Los principales proyectos son “La modificación de la ley de Vialidad, de la ley de IPV y Capresca”. Por otra parte, se analizaron las iniciativas que aluden a la “Responsabilidad Fiscal Municipal”, la “Modificación de la Ley de Inversión Pública”, la “Creación del ARCA (Agencia de recaudación Catamarca)”, como así también otro instrumento referente a la “Infraestructura de datos especiales”. También fueron tema de discusión los proyectos de “Transición democrática de Gobierno”, una iniciativa de ley de “Alcohol Cero”, y la regulación de los “Horarios de espectáculos nocturnos”.
Cabe aclarar que el conflicto en Antofagasta es el agua dulce y viene desde hace tiempo, porque es justamente el agua lo que falta. Lo que debería hacerse para destrabar el conflicto es un acueducto desde el Río Los patos, como solución ideal. Ahora, el gobierno plantea una solución alternativa: la creación de dos diques en Antofagasta, prometiendo el acueducto para un futuro.
Es Julio Taritolay quien se había puesto del lado del pueblo para defender el agua y había asegurado que se solucionaría el problema. Ahora el gobierno asegura que se solucionará el problema con una especie de trueque: ellos utilizarán el agua del Río Los patos, mientras que garantizarían el agua en Antofagasta con los diques, en un principio. Resta esperar a ver si la sociedad aprueba esta vía de solución y si confía en la promesa del gobierno.
