Catamarca recibió con mucha alegría esta noticia, en el Año Jubilar por los 400 años de la presencia de la Virgen del Valle entre nosotros. Ahora la Causa pasa a las manos del Papa Francisco.
Con gran júbilo, se conoció que el Congreso Ordinario de Cardenales, aprobó por unanimidad todo lo actuado acerca del milagro atribuido a la intercesión de Fray Mamerto Esquiú.
La novedad fue dada a conocer en la mañana del lunes 16 de junio, a través de un comunicado de Fray Emilio Luis Andrada, Ministro de la Provincia de Franciscana de la Asunción de la Santísima Virgen del Río de la Plata de la Orden de los Frailes Menores.
Al respecto, el Vicepostulador de la Causa, Fray Marcelo Méndez, comentó que “los Cardenales han tenido que examinar todo lo actuado hasta este momento, revisando todo lo que hicieron los historiadores, lo que se hizo en la fase diocesana, y, sobre todo, el dictamen de los médicos peritos de la Santa Sede, y el dictamen de los teólogos, para dar un veredicto final sobre la Causa de Fray Mamerto Esquiú. Ahora pasa a las manos del Santo Padre, quien decidirá el lugar y la fecha de la beatificación”.
Fray Méndez dijo que: “La comunidad franciscana recibió esta noticia con mucha alegría, entusiasmo y con un gran agradecimiento a Dios, Nuestro Señor, por lo que ha obrado”, y manifestó que: “El provincial ya ha determinado que en todas las comunidades se toquen las campanas y se hagan celebraciones litúrgicas de acción de gracias”.
Por su parte, Fray Andrada invita a todos los fieles a unirse en oración, “éste es el momento de rezar para que el Santo Padre, si es voluntad de Dios, emita el Decreto tan esperado por la Orden Franciscana, responsable de la Causa, por los fieles devotos de Catamarca, donde nació, se consagró y se hizo notoria su figura como religioso franciscano; los fieles de Córdoba, donde fue Obispo aún recordado por su humilde ministerio, y de toda Argentina e incluso de fieles de otros países”, expresa en el comunicado.
El milagro atribuido a la intercesión del Venerable Siervo de Dios Fray Mamerto Esquiú es la curación, inexplicable científicamente, de una niña que padecía una afección de osteomielitis. El mismo había sido aprobado por la Comisión Teológica de la Congregación para la Causa de los Santos, el pasado 24 de abril de 2019.