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Catamarca

Política

Cementerio: la tapia facturada no está y hay cuevas de animales en las tumbas

Se trata del Cementerio de Alijilán donde los vecinos expusieron la queja.

La semana pasada El Aconquija publicó que un delegado municipal había intimado a vecinos a pagar los impuestos del cementerio metiéndose con un tema sentimental y muy delicado en un contexto de emergencia sanitaria y económica excepcional. El caso es que el municipio es rápido para intimar por impuestos pero la tapia que se facturó no está hecha y las tumbas están abandonas al punto de que hay cuevas de animales.

Se trata del Cementerio de Alijilán, en el Este catamarqueño, donde los vecinos ya expusieron en una nota elevada al intendente, Rafael Olveira, la queja formal por la actitud del Delegado municipal, Jorge “Kitún” Salas, que no tuvo ninguna consideración ni sensibilidad y se dispuso a apretar a los familiares a cancelar deudas de montos impagables acrecentando la ansiedad y angustia propia de esta etapa de pandemia mundial.

Los vecinos comentaron que el Delegado “Kitún” Salas, los intimó a pagar los impuestos del cementerio con cifras irrisorias no solo por la situación de emergencia sanitaria y económica que transitamos al tiempo que recordaron que figuran obras en los papeles desde 2013 que jamás se concretaron, por ejemplo la tapia (aún continúa la tela zaranda alrededor del predio). El Delegado quiere cobrar deudas que van de 1.200 pesos a 12.000 pesos.

Cementerio

De manera que el municipio tiene el tupe de cobrar o intimar a los vecinos en un momento inoportuno a la vez que se encuentra en falta por haber publicitado una obra que no concretó jamás. Como si fuera poco con constancia de haber sido aprobada en los organismos provinciales y con presupuesto asignado, lo que significa que estamos ante una estafa o delito administrativo que requiere de un fiscal con cojones para investigar.

Lo peor de todo es el abandono del lugar. En la imagen una tumba con cuevas por donde entran y salen animales sin que nadie se ocupe del tema. Es que los funcionarios están ocupados en su crecimiento patrimonial. “Kitun” compró vehículos, propiedades, moto de competición y hasta panadería tiene. Una situación económica totalmente diferente a la de la mayoría de los vecinos. Todo eso con su modesto sueldo de 22 mil pesos. ¿Cómo hace?