Fabiana Gómez es la doctora propuesta por el Ejecutivo para integrar la Corte de Justicia de la provincia. Se recibió de abogada, integra el Colegio de Abogados. Pero parece que para algunos medios es más relevante que sea la esposa del intendente de Fray Mamerto Esquiú, Guillermo Ferrerya. Un diario local la nombró en calidad de “esposa de”, como una forma de invalidar su trayectoria académica y pública.
Ayer un medio de comunicación la trató de “la esposa de” porque ella es la señora del intendente Ferreryra. El diario la puso en tapa, pero nombró a Martel, por un lado y a “la esposa de” Guillermo Ferreyra como las propuestas del gobierno para la Corte. Esto genero una cuestión de perspectiva de género y de lenguaje cuestionado por quien es ahora la mujer propuesta para ocupar ese cargo.
Gómez salió a condenar este tipo de expresiones mediáticas usadas por los periodistas: “Repudio enérgicamente estas expresiones machistas, cargadas de violencia y desmedro. Todos los días una mujer sufre este tipo de violencia en los distintos ámbitos, ya sean laborales, políticos, sociales, deportivos o de desarrollo, pese a que existe un constante crecimiento de la conciencia respecto de la importancia de la igualdad de oportunidades y la erradicación del sexismo de las sociedades. La naturalización de conductas y lenguajes machistas, como el empleado por este medio de comunicación, genera un estancamiento cultural que se debe erradicar y que no debemos soportar”.
Sin lugar a dudas, ha sido tapa muy desafortunada, dado el contexto de grandes avances en la sociedad en torno al rol de la mujer. Hechos como éste invisibilizan a la mujer profesional, dejando de lado su preparación y pone como prioridad cuestiones personales, como estar casada con un funcionario público. Las funcionarias catamarqueñas venían solicitando una mujer, y el mismo Ejecutivo había afirmado que habría un cupo femenino para la nueva Corte.
Desde los medios, es importante darle un tratamiento a las temáticas de género. Hemos dado pasos agigantados en construcción de nuevos enfoques que no denigren a nadie, en ningún ámbito. Los críticos de siempre son los que aparecen para menoscabar la capacidad de las mujeres, más aún en el ámbito político donde, lamentablemente, queda un largo camino por recorrer.