La provincia de Catamarca dio un paso importantísimo para vencer al COVID-19. Logró desarrollar 3000 súper barbijos sociales con nanotecnología con capacidad de inhibir el SARS-CoV-2. Un detalle que hace mucho más valorable este avance: los barbijos fueron confeccionados por alumnos catamarqueños. En principio, estos elementos de protección será entregados a distintas instituciones donde trabaja el persona esencial.
“Con todo el apoyo del Gobernador y la donación de las telas por parte de la empresa Kovi, confeccionamos desde el ámbito del Ministerio los barbijos sociales, con la mejor tecnología desarrollada por científicos y científicas de Argentina, para colaborar y sumar esfuerzos en la protección de todos los catamarqueños. Es fundamental que el Estado avance de manera activa, con mucho compromiso, para mitigar esta pandemia”, señaló la ministra de Ciencia e Innovación Tecnológica Eugenia Rosales.
Estos barbijos se pueden conseguir en el mercado a un costo bastante elevado. Por ese motivo es que con tecnología desarrollada por el CONICET y la UNSAM en Catamarca pusieron manos a la obra y empezaron a fabricarlos. “Desde el inicio de la pandemia, en Catamarca asumimos que toda herramienta que podamos sumar para cuidar la salud de los catamarqueños y catamarqueñas es fundamental, sobre todo para aquellos que tienen el deber de cuidarnos como personal esencial” Remarcó la Ministra.
Los responsables de la confección de los súper barbijos, fueron alumnos e instructores de la Escuela Misión Monotécnica 71 de Fray Mamerto Esquiú. Desde el Ministerio se desarrolló un convenio con la empresa Kovi SRL, única licenciataria de la producción de estas telas en el país, para que llegaran a la Provincia y convertirse en materia prima de desarrollo de los mismos.
Según informaron las autoridades de la provincia, “las telas son de algodón, poliéster y además un polímero ambientalmente amigable, que facilita la retención de agentes activos basados en plata y cobre (con reconocida eficiencia antimicrobiana). Esta combinación reúne tecnología avanzada y materiales accesibles para su desarrollo”. También aseveraron que “sus propiedades antimicrobianas fueron testeadas con éxito por el Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI) y su acción antiviral por el Instituto de Virología del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA)”.
“En comparación con los tapabocas comunes, es autosanitizante, disminuye la probabilidad de infectarse y también la posibilidad de contagiar a otros. Es más higiénico, y por sus propiedades evita que quien lo use respire sus propios gérmenes”, aseguó Rosales. Los barbijos también cuentan con una durabilidad equivalente a 15 barbijos descartables. Además pueden usarse durante 8 horas sin lavarse, manteniendo todas sus capacidades.
