El Frente de Todos Catamarca fue uno de los casos excepcionales del país. En un contexto difícil para el oficialismo nacional (derrota electoral), llama la atención las claves del éxito del peronismo catamarqueño para imponerse cómodamente en las PASO 2021. La imagen de Corpacci, la gestión de Gustavo, la movilidad de la dirigencia en sublemas y el recambio generacional.
Mientras la oposición fue dividida arriba, el Frente de Todos fue unido en la cabeza por la imagen de la exgobernadora y candidata a senadora nacional, Lucia Corpacci. Su figura fue central para lograr la unidad del peronismo catamarqueño porque la dirigente conserva una buena imagen de cara a la sociedad y respeto interno en el Partido.
Atado arriba, lo segundo fue generar los sublemas con los candidatos que aspiraban a ocupar un cargo en el Concejo Deliberante de SFVC, lo que necesariamente movilizó a la militancia a buscar el voto. Al final, quedan representadas varias listas que se mezclan, nadie se corta solo o todos se sienten contenidos. Un dato importante, el recambio generacional. Los que aportaron poco y nada son los diputados que iban colgados en la lista sabanas y funcionarios del Ejecutivo provincial.
Hay que diferenciar capital del interior. En capital, la mayoría coincide en destacar la buena gestión y la muñeca política del intendente, Gustavo Saadi, a quién ven como el sucesor natural de Raúl Jalil. En el interior, el aparato estatal sigue teniendo su peso pero si la gestión es mala, los resultados electorales pueden ser adversos. Habría que agregar que el armado opositor era liviano.
No la tiene fácil tampoco el oficialismo. Se sabía que por la pandemia perdería muchos votos y la comparación con resultados anteriores en un contexto más favorable podría deslucir el triunfo de las PASO 2021 pero lo cierto es que al FT le servía hoy aprobar con un 6. Claro que esto fue solo una encuesta cara, los verdaderos números o los definitivos se verán recién en noviembre.
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