El país se encuentra en una situación de inestabilidad por la incertidumbre ocasionada por las elecciones que serán el 27 de octubre, y en la cual compiten por su lugar en Casa Rosada, Mauricio Macri por el espacio de Juntos por el Cambio, y la oposición de Alberto Fernández con el Frente de Todos. Estos, al encontrarse más ocupados en la actualidad, que, en el futuro, genera dudas en los mercados internos y externos.
En esta línea, después de las PASO se pudo ver un fenómeno que estuvo condicionado por la victoria de la oposición a fin del Kirchnerismo, como destacaron en los principales diarios financieros de los Estados Unidos. Esto fue seguido de una devaluación de la moneda doméstica por la pérdida del poder adquisitivo que repercute en el primer activo financiero, el dólar norteamericano.
Todo este escenario desembocó en un paquete de medidas orientadas a generar un alivio en el bolsillo de los ciudadanos, los cuales se ven afectados directamente por la suba de los precios en la canasta básica. Así, surgieron las implementaciones de la eliminación del Impuesto al Valor Agregado, la exención del monotributo de septiembre y la suba del mínimo no imponible de los impuestos a las ganancias.
Respecto a esto, en la provincia de Jujuy se realizó la 111° reunión plenaria del Consejo Federal del Trabajo con la participación de todos los ministros y secretarios del país. Los referentes, además de analizar la situación actual, elaboraron un documento en apoyo a la hecha ya por los gobernadores en contra de las acciones del Gobierno Nacional.
Entre los puntos más destacados del documento se detalla la solicitud al Ministerio de Producción y Trabajo para que articule las medidas conducentes a la preservación del poder adquisitivo de los ingresos de los trabajadores. Ya que, el impuesto de la inflación hace que el dinero sirva menos, y como destaca el economista Javier Milei, la moneda argentina ya perdió dos de sus tres funciones, unidad y reserva de valor.
También la asignación de recursos de los programas existentes, destinados al sostenimiento de los puestos de trabajo, y en su caso la contención de los trabajadores temporarios de las distintas regiones del país. Por último, pidieron el fortalecimiento de las economías regionales, el mejoramiento continuo de las condiciones laborales y el sostenimiento de las fuentes y puestos de trabajo.
Néstor Di Lullo subsecretario de Trabajo de la provincia contó que en las mesas de diálogos se trató el creciente deterioro de la economía argentina y las pérdidas de miles de puestos de trabajo en todo el país. Esto se suma a los continuos reclamos realizados por los gobernantes de las provincias teniendo en cuenta la baja en sus presupuestos por la disminución de la coparticipación.